Dios: Una persona muy importante
El error de dar por sentado a Dios
En un mundo donde las noticias y la información nos abruman constantemente, es fácil pasar por alto la importancia fundamental de Dios. Es un error que cometemos a nuestro propio detrimento, pues Él es un Ser de suma relevancia que no debe ser subestimado.
La importancia de Dios
Dios es el creador de todo el universo, tanto de las cosas más grandiosas como de las más humildes. Él sustenta el mundo con su poder y guía el curso de la historia según su voluntad. Es omnisciente, conociendo todos los secretos y posibilidades.
Pero lo más importante es que Dios es el camino hacia la vida eterna y la verdadera felicidad. En su Hijo, Jesucristo, Él se revela a la humanidad como el centro de la historia y la medida de todo bien.
La insatisfacción de ignorar a Dios
Cuando damos por sentado a Dios, nos privamos de su presencia en nuestras vidas. Nos volvemos superficiales en nuestro entendimiento del mundo, pues ignoramos al actor principal. Y lo que es peor, nos robamos a nosotros mismos el gozo y la satisfacción que solo Él puede dar.
El secreto de la satisfacción
El secreto para evitar el error de dar por sentado a Dios es deleitarnos en Él constantemente. Debemos admirarlo, amarlo, atesorarlo y adorarlo. Al hacerlo, descubriremos que su gloria y nuestra satisfacción están intrínsecamente entrelazadas.
Dios es una persona de suma importancia que no debe ser ignorada. Su gloria y nuestro gozo están en armonía. Que podamos vivir nuestras vidas reconociendo y honrando su centralidad, para experimentar la verdadera plenitud y el propósito que solo Él puede brindar.
Preguntas Frecuentes
¿Por qué es Dios una persona tan importante?
Dios creó todo en el universo, sostiene el mundo y controla los asuntos de los hombres y las naciones. Él conoce todas las cosas, es el único camino a la vida eterna y el centro de la historia humana, siendo la medida de toda verdad, belleza y bondad.
¿Cómo muestra Dios su desagrado por ser pasado por alto?
Dios expresa su disgusto al afirmar repetidamente que su objetivo en todo lo que hace es ser honrado, alabado, glorificado, amado, atesorado, confiado, cantado, declarado, confesado y disfrutado.
¿Por qué es peligroso ignorar a Dios?
Ignorar a Dios conduce a una comprensión y análisis superficiales de todo, ya que Dios es el actor principal en el mundo y todo tiene un significado inherente en relación con Él.
¿Cómo puedo evitar pasar por alto a Dios?
Puedes hacerlo deleitándote en Dios, saboreándolo, admirándolo, amándolo, atesorándolo y maravillándote de Su grandeza. Al hacerlo, glorificas a Dios y experimentas una profunda satisfacción en Él.