¡Salvos por gracia: un nuevo comienzo con Cristo!
Era de oscuridad y pecado
Antes de conocer a Cristo, estábamos perdidos en el pecado y desobediencia. Éramos esclavos de las tentaciones y deseos pecaminosos. Por naturaleza, estábamos destinados a la ira de Dios.
La gracia salvadora de Dios
Pero Dios, en su infinita misericordia y amor, intervino. Aunque estábamos muertos en nuestros pecados, nos dio vida al resucitar a Cristo de entre los muertos. No por nuestros méritos, sino por la gracia de Dios, somos salvos.
Resucitados y sentados con Cristo
Cristo nos ha resucitado junto con Él y nos ha sentado a su lado en los lugares celestiales. En Él, somos nuevas criaturas, destinadas a buenas obras.
Un nuevo pueblo en Cristo
Antes, los gentiles eran considerados extranjeros y excluidos de las promesas de Dios. Pero ahora, en Cristo, judíos y gentiles se han convertido en un solo pueblo. Él ha derribado las barreras de hostilidad y ha reconciliado a ambos grupos con Dios.
Paz y unidad a través de Cristo
Cristo es nuestra paz. Ha unido a judíos y gentiles en un solo cuerpo, creando un nuevo pueblo. A través de su sacrificio en la cruz, ha puesto fin a nuestra enemistad y nos ha traído paz.
Hijos e hijas de Dios
Como gentiles, ahora somos hijos e hijas de Dios, miembros de su familia. Estamos construidos sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, con Cristo como piedra angular. En Él, somos un templo santo para Dios, habitado por su Espíritu.
Preguntas Frecuentes sobre Efesios 2: Salvados por Gracia
¿Por qué estábamos muertos en el pasado?
Porque éramos desobedientes y llenos de pecados. Vivíamos según nuestros deseos pecaminosos y bajo la influencia del diablo, sujetándonos a la ira de Dios.
¿Cómo nos salvó Dios?
Dios, en su infinita misericordia, nos dio vida cuando resucitó a Cristo de entre los muertos. Por gracia, nos resucitó y nos sentó en los lugares celestiales con él.
¿Por qué no podemos atribuirnos el mérito de nuestra salvación?
La salvación es un regalo de Dios, no una recompensa por nuestras buenas obras. No hay nada que hayamos hecho para merecerla.
¿Qué significa ser una nueva creación en Cristo?
Dios nos ha creado de nuevo en Cristo, no solo para perdonar nuestros pecados, sino también para darnos el poder de hacer buenas obras que él ha planeado para nosotros.
¿Cómo ha unido Cristo a judíos y gentiles?
Cristo ha derribado el muro de hostilidad entre judíos y gentiles al abolir el sistema de la ley con sus mandamientos y reglamentos. Nos ha reconciliado con Dios y entre nosotros creando un nuevo pueblo en sí mismo.
¿Qué papel juegan los apóstoles y los profetas en la iglesia?
Son el fundamento sobre el cual se construye la casa de Dios, con Cristo Jesús como piedra angular. A través de ellos, Dios nos ha revelado su plan de salvación.
¿Cómo participamos en la morada de Dios?
Como gentiles, ahora somos parte de la casa de Dios, donde Dios habita por su Espíritu. Estamos siendo edificados juntos en un templo santo para el Señor.
