¡Una advertencia profética de juicio sobre Samaria y Jerusalén!
El lamento de Miqueas
Miqueas, un profeta de Dios, fue testigo de la inminente ruina de Samaria y Jerusalén durante los reinados de Jotam, Ahaz y Ezequías. En su profecía, clama a todos los pueblos a escuchar y a Dios como testigo de los pecados de Israel y Judá.
Pecados y consecuencias
El profeta destaca la transgresión de Jacob (representada por Samaria) y los altos lugares de Judá (simbolizados por Jerusalén) como causantes del inminente juicio divino. Dios descenderá de su morada celestial y pisoteará las fortalezas de la tierra, dejando a las montañas y valles derretidos como cera bajo el fuego.
La caída de Samaria
Miqueas predice la destrucción de Samaria, convirtiéndola en ruinas de viñedos. Sus ídolos y riquezas obtenidas de la prostitución será destruidas. La ciudad se lamentará amargamente por sus heridas incurables.
El juicio se extiende a Jerusalén
El juicio de Dios no se limita a Samaria. También alcanzará a Jerusalén, la puerta del pueblo de Dios. Se pide a la gente que guarde silencio sobre la inminente desgracia. En cambio, deben cubrirse de polvo y lamentarse como bestias salvajes.
Advertencias a las ciudades
Miqueas advierte a varias ciudades específicas de las consecuencias de sus pecados. Laquis debe preparar sus carros de guerra, pues es el origen de la maldad en Judá. Moreshet Gat recibirá regalos como soborno, pero las casas de Ajzib engañarán a los reyes de Israel. Maresha tendrá un heredero, pero la gloria de Israel se desvanecerá en Adulán.
Preguntas frecuentes sobre lamentación por Samaria y Jerusalén
¿Quién fue el profeta que habló estas palabras?
Micah
¿A quiénes se dirigen estas palabras y por qué?
A los pueblos, la tierra y el Señor Dios, como testimonio de las transgresiones de Jacob y la casa de Israel.
¿Cuáles son las transgresiones de Jacob y la casa de Israel?
Samaria (Samaria) y Jerusalén (los lugares altos de Judá).
¿Qué castigo vendrá sobre Samaria?
Será destruida y convertida en ruinas.
¿Qué sucederá con los ídolos de Samaria?
Serán destruidos y quemados.
¿Cuál es el estado de Judá y Jerusalén?
Heridas e incurables, con el desastre acercándose.
¿Qué se les pide a las ciudades de Judá que hagan?
Lamentarse, llorar y humillarse.
¿Qué profecía se da sobre el futuro de Israel?
La gloria de Israel vendrá a Adullam, pero habrá cautiverio y pérdida de niños preciosos.