¡Un nuevo mandamiento de Cristo: "Ámense unos a otros como yo los he amado"!
El amor como espejo de Cristo
En un pasaje profundamente conmovedor del Evangelio de Juan, Jesús entrega un nuevo mandamiento a sus discípulos: "Ámense unos a otros, así como yo los he amado" (Juan 13:34). Este mandamiento, que se destaca como un faro de guía en el camino de la fe cristiana, lleva consigo dos características que lo hacen fundamental para nuestras vidas.
En primer lugar, el amor que Jesús ordena es un amor que refleja el propio amor de Cristo. Cuando Jesús se inclinó para lavar los pies de sus discípulos, mostró un acto de humildad y servicio que estableció un modelo para nuestro propio amor. Debemos renunciar a nuestros propios intereses y buscar el bienestar de los demás, sirviéndoles con compasión y gracia.
El amor como poder de Cristo
Además de ser un modelo, el amor de Cristo también se convierte en el poder que nos permite cumplir este mandamiento. En Juan 15:9-10, Jesús declara: "Permanezcan en mi amor... si guardan mis mandamientos, permanecerán en mi amor, así como yo he guardado los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor".
Al permanecer en Cristo, nos conectamos con la fuente misma del amor. Su amor fluye a través de nosotros, dándonos la fuerza y la capacidad para amar a los demás incluso en medio de las adversidades. Esta unión con Cristo nos empodera para vivir vidas de amor abnegado y sacrificial.
El amor que rompe barreras
El mandamiento de Cristo de amarnos unos a otros trasciende todas las barreras de raza, cultura y estatus social. Nos llama a abrazar la unidad y la armonía, a superar nuestras diferencias y a vernos unos a otros a través de los ojos del amor.
Este amor no se limita a palabras vacías, sino que se manifiesta en acciones concretas de bondad, misericordia y perdón. A través de este amor, podemos crear una comunidad donde todos se sientan valorados, respetados y amados.
El nuevo mandamiento de Cristo de amarnos unos a otros es un faro de esperanza y guía en nuestro viaje de fe. Al reflejar el amor abnegado de Cristo y al conectarnos con su poder vivificante, podemos convertirnos en instrumentos de amor y unidad en el mundo. Que este mandamiento inspire nuestras acciones y relaciones, transformando nuestras vidas y nuestras comunidades en un reflejo del amor y la gracia de Dios.
Preguntas frecuentes
¿Qué es nuevo en la orden de Jesús de amarnos unos a otros?
R: La orden es nueva porque:
Jesús es el patrón de nuestro amor, mostrando humildad y servicio.
Jesús es el poder de nuestro amor, proporcionando la conexión con el amor del Padre.
¿Cómo podemos vivir según el patrón de amor de Jesús?
R: Debemos renunciar a nuestro estatus y servir a los demás, realizando actos prácticos de ayuda.
¿Cómo podemos obtener el poder para amar como Jesús?
R: Debemos permanecer en Jesús, confiando en él como nuestro Salvador y tesoro.
¿Cómo puede Jesús ser nuestro patrón y poder del amor, dadas nuestras propias imperfecciones?
R: Jesús quitó la ira de Dios muriendo en nuestro lugar, permitiendo que su amor fluya hacia nosotros.