¡Señales y prodigios añaden multitudes al Señor!
Por qué las señales eran cruciales en la iglesia primitiva
En Hechos, los apóstoles realizaban señales y prodigios que atraían a multitudes. Estas demostraciones de poder divino no solo despertaban asombro, sino que también llevaron a que "más creyentes se unieran al Señor, multitudes tanto de hombres como de mujeres".
El propósito de las señales
Los cristianos oraban por señales y prodigios porque ayudaban a:
- Atraer a las personas a la fe salvadora: Las señales demostraban el poder de Dios y confirmaban el mensaje del evangelio, lo que hacía que las personas estuvieran más dispuestas a creer.
- Servir como testigos de la Palabra de Dios: Las señales no sustituían la predicación, sino que la respaldaban y la autentificaban, mostrando que era verdaderamente de Dios.
¿Es apropiado orar por señales hoy?
Algunos objetan orar por señales y prodigios, argumentando que socava la centralidad de la Palabra de Dios. Sin embargo, el ejemplo de la iglesia primitiva sugiere que:
- No es pecaminoso buscar señales: Si nuestro deseo es glorificar a Dios y salvar almas, no es malo pedirle que demuestre su poder.
- Las señales no compiten con la Palabra: Las señales son testigos secundarios de la Palabra, no un reemplazo. Ayudan a preparar los corazones para recibir el mensaje del evangelio.
Un llamado a orar por señales
El teólogo Martyn Lloyd-Jones creía que hoy necesitamos señales y prodigios:
"La necesidad hoy es demasiado grande para el ministerio ordinario. Necesitamos una autenticación de Dios, de lo sobrenatural, de lo espiritual, de lo eterno... Solo puede ser respondido por Dios derramando su Espíritu sobre nosotros y llenándonos como lo hizo con la iglesia primitiva".
Oremos por un avivamiento de señales y prodigios, no para nuestro propio beneficio, sino para que Dios sea glorificado y las personas sean salvadas.
Preguntas Frecuentes
¿Por qué la iglesia oraba por señales y maravillas?
Según el texto, la iglesia oraba por señales y maravillas porque ayudaban a atraer a las personas a la fe salvadora.
¿Existe una contradicción entre orar por señales y maravillas y la centralidad de la Palabra de Dios?
No, porque las señales y maravillas no sustituyen la Palabra de Dios, sino que son testigos divinos de su valor y verdad.
¿Por qué la oración de Hechos 4:30 no era "impía y adúltera"?
Porque la demanda de señales venía de un corazón anhelante por la gloria de Dios y la salvación de los pecadores, no de un corazón resistente que se negaba a creer.
¿Deberíamos orar por señales y maravillas hoy?
Sí, según el autor, porque son un testimonio divino de la Palabra de gracia de Dios y pueden ayudar a romper las barreras de indiferencia, cinismo y falsa religión, lo que lleva a las personas al evangelio.