San Juan 10: Un Estudio Bíblico sobre el Buen Pastor
El Buen Pastor y los Falsos Pastores
En Juan 10, Jesús se presenta a sí mismo como el "buen pastor" en contraste con los "falsos pastores". Los falsos pastores entran en el redil de las ovejas por medios ilegítimos, mientras que el Buen Pastor entra por la puerta legítima.
Los falsos pastores abandonan a las ovejas, mientras que el Buen Pastor las conoce y las guía. Los falsos pastores buscan su propio beneficio, mientras que el Buen Pastor da su vida por las ovejas.
El Buen Pastor y sus Ovejas
Las ovejas reconocen la voz del Buen Pastor. No siguen a los extraños porque no conocen su voz. El Buen Pastor protege a sus ovejas y las guía por caminos seguros. Les da vida abundante, satisfaciendo sus necesidades físicas y espirituales.
El Buen Pastor y el Padre
Jesús declara tener una relación íntima con el Padre. Tiene autoridad sobre su propia vida y la da voluntariamente. El Buen Pastor es uno con el Padre en naturaleza y propósito.
Otras Ovejas
Además de las ovejas judías, Jesús tiene otras ovejas (gentiles) que también vendrán a su redil. Habrá un solo rebaño bajo un solo pastor.
Unidad con el Padre
Jesús afirma ser uno con el Padre. Esta unidad implica que Jesús es divino, compartiendo la misma esencia y propósito con Dios Padre. Esto es una blasfemia para los judíos, que entienden que Jesús está afirmando ser Dios.
Razonamiento desde la Escritura y las Obras
Jesús cita el Salmo 82 para demostrar que otros en las Escrituras han sido llamados "dioses". Además, sus obras, como sanar a los enfermos y resucitar a los muertos, dan testimonio de su deidad. A pesar de la oposición, muchos creen en Jesús debido a sus palabras y obras.
El estudio de Juan 10 revela la naturaleza única de Jesús como el Buen Pastor. Él es la puerta al redil, el guía de las ovejas y el que da vida abundante. Su relación íntima con el Padre y su afirmación de ser uno con Dios revelan su verdadera identidad como el Hijo de Dios.
