¿Rompió Jesús las reglas del sábado?

El debate sobre los discípulos y las espigas

En el evangelio de Mateo, se relata un encuentro entre Jesús y los fariseos, en el que los discípulos de Jesús fueron acusados de quebrantar las leyes del sábado. Los fariseos, estrictos seguidores de la ley judía, sostenían que recoger espigas de grano y comerlas era una violación del descanso sabático.

Jesús, sin embargo, defendió las acciones de sus discípulos, argumentando que las necesidades humanas tenían prioridad sobre las reglas religiosas. Citó el ejemplo de David, quien había comido pan consagrado en el templo cuando estaba hambriento, y señaló que los sacerdotes realizaban tareas en el templo en sábado sin que se les considerara transgresores.

La curación de la mano marchita

En otra ocasión, mientras Jesús enseñaba en una sinagoga, se le acercó un hombre con una mano paralizada. Los fariseos, presentes en la reunión, preguntaron si era lícito curar en sábado. Jesús les respondió que era natural ayudar a alguien en apuros, incluso en día de descanso.

Los encuentros narrados en Mateo 12 demuestran que Jesús no consideraba que el sábado fuera un conjunto de reglas rígidas e inflexibles, sino un principio de descanso y renovación. Creía que la misericordia y la compasión debían prevalecer sobre las prácticas religiosas cuando se trataba de las necesidades humanas.

Preguntas Frecuentes

¿Es aceptable romper las reglas del sábado por necesidad?

Sí, en circunstancias excepcionales como el hambre, como se demuestra en el caso de David y sus compañeros. Sin embargo, Jesús enfatiza que la misericordia y la bondad deben tener prioridad sobre las reglas estrictas (Mateo 12:3-7).

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¿Es legítimo sanar en sábado?

Sí, ayudar a los necesitados, como curar a alguien con una mano marchita, se considera una obra de misericordia y no viola el sábado (Mateo 12:10-13).

¿Cómo se explica la sanación de una persona poseída por un demonio?

Jesús afirma que su poder para expulsar demonios proviene de Dios y es una señal de que el reino de Dios ha llegado (Mateo 12:28).

¿Por qué la generación actual busca pruebas?

Jesús critica a la gente de su tiempo por exigir pruebas sobrenaturales, en lugar de aceptar su mensaje y sus obras como evidencia del favor de Dios (Mateo 12:38-39).

¿Qué le sucede a alguien que se limpia de maldad pero no recibe el mensaje del reino?

Pueden volver a caer en el pecado y terminar en un estado peor que antes (Mateo 12:43-45).

¿Quién es verdaderamente la familia de Jesús?

Jesús considera a sus seguidores como su verdadera familia, aquellos que obedecen la voluntad de su Padre celestial (Mateo 12:49-50).

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