¿Qué quiso decir Jesús con "Paz, quédate quieta"?

El poder de la fe en la tempestad

¿Alguna vez te has visto en una situación en la que no tenías control, simplemente dejándote llevar? Puede que no sea un trayecto que hubieras deseado, pero debías confiar en que llegarías a tu destino.

En la vida, no podemos evitar salir ilesos de situaciones que escapan a nuestro control. El miedo nos impulsa a controlar cada aspecto de nuestra situación para que, si fallamos, al menos sabemos que lo intentamos.

¿Pero qué pasaría si estuviéramos destinados a soltar ese control y confiar en que las cosas saldrán como se supone? Jesús estaba seguro de que nadie en el barco perecería. Pronunció "paz" a la tormenta que azotaba con turbulencia y miedo.

La Biblia dice en Juan 14:27 que "Jesús os dará paz, y no como la da el mundo". La Biblia también dice en Marcos 8:35 que "el que quiera salvar su vida, la perderá, pero el que pierda su vida por causa mía y del evangelio, la salvará".

El significado de "Paz, quédate quieta"

Según John Gill, "Se levantó de su almohada y se puso de pie; y en una forma majestuosa y autoritaria reprendió al viento, como si fuera un siervo que había excedido su comisión; a lo que muestra cierto resentimiento: como si lo que era muy tumultuoso y tempestuoso, y amenazaba con un naufragio y la pérdida de vidas, hubiera bramado demasiado y demasiado tiempo: lo cual era muy inusual y extraordinario; porque después de que el viento ha cesado y la tormenta ha terminado, las aguas del mar, agitadas por ella, siguen bramando y en un movimiento violento, durante un tiempo considerable; mientras que aquí, tan pronto como se pronunció la palabra, inmediatamente, de una vez, el viento cesó y el mar se calmó: una prueba clara de que él debe ser el Dios Altísimo, que reúne los vientos en sus puños y acalla el ruido de las mares y sus olas".

Leer Más:  ¿Quién es la Bestia con Siete Cabezas y Diez Cuernos?

En otras palabras, cuando Jesús reprende al viento, este parece intentar resistirse a él. Las tormentas en este cuerpo de agua en particular habían acabado con la vida de muchos marineros, y los discípulos lo sabían. Pero Jesús no se inmuta. Sin una pizca de temor, les dice a las olas: "Paz, quédate quieta".

"Paz, quédate quieta" nos recuerda que Dios tiene todo bajo control, incluso en las tormentas más violentas.

Preguntas frecuentes

¿Qué significa "paz, estad quietos"?

En el contexto bíblico, "paz, estad quietos" es un mandato de Jesús para calmar una tormenta que amenazaba con hundir el barco en el que viajaba con sus discípulos. Esta frase representa la autoridad y el poder de Jesús sobre la naturaleza y las circunstancias difíciles.

¿Qué nos enseña esto sobre el control y la confianza?

La historia de Jesús calmando la tormenta nos enseña que debemos confiar en Dios, incluso en situaciones que están fuera de nuestro control. No debemos dejarnos llevar por el miedo y la ansiedad, sino tener fe en que Dios tiene todo bajo control y que nos guiará a través de cualquier dificultad.

¿Cómo podemos experimentar la paz de Dios en nuestras vidas?

Podemos experimentar la paz de Dios en nuestras vidas al confiar en él, entregando nuestras preocupaciones y ansiedades a él. La Biblia nos dice que la paz de Dios "sobrepasa todo entendimiento" (Filipenses 4:7). Podemos encontrar paz en su presencia a través de la oración, la meditación y la lectura de su Palabra.

¿Por qué es importante evitar la preocupación y la negatividad?

La preocupación y la negatividad nos alejan de la paz de Dios. Nos llenan de miedo y ansiedad, que pueden paralizarnos y evitar que experimentemos la plenitud de la vida. La Biblia nos advierte que no estemos "ansiosos por nada" (Filipenses 4:6), sino que debemos confiar en Dios y confiar en que él cuidará de nosotros.

Leer Más:  ¿Qué es la Batalla de Armagedón y cuál es su significado?

¿Cómo podemos superar el "tren de la preocupación"?

Para superar el "tren de la preocupación", debemos disciplinar nuestras mentes para que se centren en pensamientos positivos y edificantes. Podemos hacer esto leyendo la Palabra de Dios, meditando en sus promesas y rodeándonos de personas que nos animan y apoyan.

Subir