¿Por qué necesitamos el evangelio?
El pecado y la ira de Dios
El apóstol Pablo explica que la ira de Dios se revela contra la impiedad e injusticia de los seres humanos (Romanos 1:18). Esta ira se manifiesta en la muerte, la futilidad y la degradación de la humanidad.
La necesidad de la justicia
Debido a que somos pecadores e injustos, necesitamos la justicia de Dios. El evangelio revela la justicia de Dios como un don gratuito que se otorga a quienes creen en Cristo (Romanos 1:17).
Las consecuencias del pecado
Para los incrédulos, la ira de Dios continúa manifestándose en la muerte, el sufrimiento y el pecado. Sin embargo, para los creyentes, estas consecuencias se transforman:
- La muerte se convierte en una puerta de entrada al paraíso
- El sufrimiento se convierte en un camino hacia la santidad
- El poder del pecado es reemplazado por un amor a la justicia
El refugio del evangelio
Frente a la ira de Dios, debemos refugiarnos en el evangelio. Este ofrece protección contra la condenación y nos brinda un futuro de esperanza y justicia. El evangelio es el poder de Dios para salvarnos de la ira venidera (Romanos 1:16).
El evangelio no solo revela la ira de Dios, sino que también ofrece un remedio para nuestra condición pecaminosa. Al confiar en Cristo, podemos escapar de la ira de Dios y recibir el don de su justicia.
¿Por qué es necesario el evangelio?
El evangelio es necesario porque la ira de Dios se revela contra toda impiedad e injusticia de los hombres que suprimen la verdad en injusticia (Romanos 1:18). Necesitamos la justicia de Dios que se revela en el evangelio como un regalo a través de la fe porque somos injustos y resistimos la verdad en injusticia.
¿Cómo se revela la ira de Dios?
La ira de Dios se revela a través de:
- La muerte humana universal (Romanos 5:15-18)
- La futilidad y miseria del mundo (Romanos 8:18-21)
- La degradación del pensamiento y comportamiento humano (Romanos 1:24-28)
¿Es la ira de Dios la única respuesta de Dios al pecado?
No, la ira de Dios siempre está mezclada con misericordia en esta era de esperanza (Romanos 2:4-5). Dios advierte con su ira y atrae con su bondad.
¿Qué diferencia hace el evangelio para los creyentes en cuanto a la muerte, el sufrimiento y el pecado?
- Para los creyentes, la muerte se convierte en una puerta de entrada al paraíso (1 Corintios 15:55-57).
- El sufrimiento se convierte en un camino hacia la santidad (Romanos 8:28).
- El poder del pecado es reemplazado por un amor a la justicia (Romanos 6).