¿Por qué Dios me llamaría "ayudante"?

El dilema moderno de la feminidad

En la actualidad, muchas mujeres se han resistido a la palabra "ayudante", una caracterización de su llamado por parte de Dios. Generalmente, un ayudante no tiene el mando; no es el centro de atención. Puede sentir (¡con razón!) que posee dones y talentos que le permiten desempeñar mejor el trabajo. Rara vez recibe tanto reconocimiento por su labor y, en ocasiones, puede sentirse como un ciudadano de segunda clase.

Algunas de estas suposiciones pueden ser ciertas, otras son mentiras descaradas, pero todas pierden el punto. Cada una de las afirmaciones anteriores proviene de la perspectiva de criaturas caídas, socializadas en el mundo moderno; ninguna intenta seriamente considerar lo que el Creador mismo tenía en mente cuando diseñó y asignó llamados a hombres y mujeres.

Ayudante con igual honor

Cuando Dios creó al hombre y a la mujer, no tenía la intención de glorificar a los hombres y degradar a las mujeres, como si "ayudante" significara de algún modo "inferior". Dios creó a los seres humanos, hombres y mujeres juntos, como el pináculo de toda la creación, a ambos a su propia imagen (Génesis 1:27). Los creó con atributos, inclinaciones y dones distintos y complementarios que los hacen indispensables el uno para el otro y para su plan de llenar la tierra con su gloria.

Dios creó al hombre primero y le dio la responsabilidad principal (y la responsabilidad) por la realización de su plan (Génesis 2:7, 15-17; 1 Timoteo 2:13) para extender su gloria (Efesios 1:10). Pero al darle al hombre la responsabilidad y la rendición de cuentas principales, ¿pretendía Dios que Adán fuera un mini-dios en la tierra, decididamente más alto que su esposa, quien también fue hecha a imagen de Dios?

No. Antes de que Dios hiciera a Eva de Adán, humilló a Adán permitiéndole descubrir cuán imposible sería su tarea sin ayuda, la ayuda de Dios y la ayuda humana. Dios ya había indicado que no era bueno que el hombre estuviera solo (Génesis 2:18), pero luego puso a Adán a nombrar a todos los animales, lo que llevó al descubrimiento de que "no se encontró ayuda idónea para él" (Génesis 2:19-20). Luego, en la creación de Eva, el "por fin" de Adán muestra el alivio y el deleite que sintió (Génesis 2:23). Sabía que necesitaba un ayudante para esta misión.

Por lo tanto, la mujer no fue creada como una esclava subyugada, sino como un medio de bendición mutua para ambos. Ella fue, y es, una socia y ayudante esencial en la gran obra de someter la creación y llenar la tierra con las imágenes de Dios, dando gloria sobre gloria al Dios eternamente digno.

Orgullo de ambas partes

En este punto, supongo que algunas mujeres de hoy querrán decir: "¡Pero el liderazgo de los hombres a lo largo de las épocas rara vez ha reflejado humildad y abnegación! Los hombres han abusado del poder y oprimido a las mujeres (y a otros) en cada generación". Sí, seguramente lo han hecho. Y no estoy excusando eso de ninguna manera. Por el contrario, anhelamos y oramos por justicia en esta vida terrenal, y mi alma tiembla cuando veo a los hombres abusar de su autoridad. Si cree por un momento que un Dios justo y santo no responsabilizará a los hombres por tal comportamiento pecaminoso, no está familiarizado con el Dios de la Biblia. El juicio es real y está por venir.

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Al mismo tiempo, no podemos condenar a los hombres sin reconocer que las mujeres también han sido culpables de estar más preocupadas por nuestra propia imagen, avance, poder y quizás incluso "derechos" que por honrar a nuestro Dios siendo el tipo de personas que él nos hizo. ser. El pueblo de Dios fue creado para acoger humilde, sacrificadamente y con alegría el privilegio de sus llamados dados por Dios y deleitarse en reflejar la propia belleza y justicia de Dios en esos llamados. Oh, cómo tanto los hombres como las mujeres deberían caer de bruces en arrepentimiento y acción de gracias al reconocer nuestros fracasos y apoyarnos en la amorosa gracia de Dios a través de Jesús.

¿Por qué Dios me llamaría "ayudante"?

¿Significa "ayudante" que las mujeres son inferiores a los hombres?

No, Dios no creó a los hombres para glorificarlos ni a las mujeres para degradarlas. Ambos fueron creados a imagen de Dios, con atributos y dones complementarios que los hacen indispensables el uno para el otro.

¿Por qué Dios creó a Eva de Adán?

Dios creó a Eva como compañera y ayudante de Adán, no como una esclava subyugada. Juntos, tenían la misión de someter la creación y llenar la tierra con la gloria de Dios.

¿Es el liderazgo masculino una forma de dominación?

El liderazgo masculino no es una forma de dominación o privilegio, sino una responsabilidad y rendición de cuentas ante Dios. El ejercicio de la autoridad debe ser humilde, desinteresado y caracterizado por el autosacrificio.

¿Por qué hay excepciones a la norma del liderazgo masculino en la Biblia?

En tiempos desesperados, Dios llamó a mujeres a roles de liderazgo típicamente asignados a los hombres. Sin embargo, estas excepciones no alteraron el plan original de Dios para el liderazgo masculino.

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¿Cómo deben responder las mujeres a su llamado como ayudantes?

Las mujeres deben abrazar su llamado como ayudantes con humildad, alegría y creatividad. Deben apoyar y animar a los líderes masculinos, utilizando sus dones y habilidades para contribuir a la obra de Dios.

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