Por qué Ayunó Jesús

El ayuno es una práctica común que se encuentra en las Escrituras. Es una abstinencia voluntaria y total de alimentos durante un tiempo o días específicos, y su objetivo es dedicarse a la oración y a buscar a Dios. El ayuno de Jesús se puede leer en una ocasión importante en Mateo 4:1-11.

Basado en este pasaje, Jesús ayunó por varias razones. Este artículo las explicará en detalle utilizando estas cuatro razones principales:

1. La Carne de Jesús Estaba en su Punto Más Débil

La primera razón es que durante el tiempo de ayuno, la carne de Jesús estaba en su punto más débil. Esto significa que durante este tiempo, Jesús fue en verdad uno de nosotros: humano. Pudo experimentar la carne más débil a través del acto de ayunar. ¿Qué significa tener la carne más débil? Significa que es susceptible a las tentaciones y por eso, durante este tiempo, Satanás pudo tentarlo.

Nosotros, como humanos, encontramos la debilidad de la carne todo el tiempo porque somos humanos. Jesús es otro caso. Jesús era completamente Dios y completamente hombre. Por eso no era susceptible a la tentación.

Sin embargo, durante este tiempo de ayuno, pudo experimentar la debilidad de la carne y convertirse en uno de nosotros. Deberíamos estar agradecidos con Él por todos Sus sacrificios, ya que Su ayuno fue solo uno de Sus sacrificios como nuestro Salvador. Esto se nos recuerda en Romanos 8:9:

"Pero ustedes no están en la carne, sino en el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en ustedes. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de él."

2. Había Vencido la Tentación

El ayuno de Jesús es también un ejemplo de cómo venció la tentación. Según las Escrituras, Satanás lo tentó muchas veces. Primero, Satanás tentó a Jesús a convertir piedras en panes para saciar Su hambre. Segundo, Satanás tentó a Jesús a arrojarse para que los ángeles vinieran a ayudarlo, demostrando que era verdaderamente el Hijo de Dios. Por último, Satanás tentó a Jesús que toda la gloria del mundo podría ser entregada a Él si adoraba a Satanás.

Pero Jesús pudo vencer todas estas tentaciones con refutaciones simples pero poderosas. Primero, dijo que el hombre no vivirá solo de pan. Segundo, dijo que no se debe poner a prueba al Señor Dios. Por último, le dijo a Satanás: "Adora al Señor tu Dios, y sírvele solo a él" (Mateo 4:10).

Este escenario nos enseña que el ayuno de Jesús es un testimonio de que Él es poderoso sobre la tentación. Esto nos da esperanza en nuestras propias tentaciones. Cuando nos encontremos con una tentación, debemos recordar a Jesús y pedirle Su ayuda para alejar a Satanás. "En el nombre de Jesús, venceré la tentación."

3. El Verdadero Alimento Viene de Dios

El ayuno de Jesús es también una demostración de Su fe hacia Su Padre. Esto se exhibe cuando constantemente se refiere a Dios al refutar la tentación de Satanás. Se refiere a Deuteronomio 8:3 en una de Sus refutaciones:

"Te humilló, te hizo pasar hambre y luego te alimentó con maná, que ni tú ni tus antepasados habían conocido, para enseñarte que el hombre no vive solo de pan, sino de toda palabra que sale de la boca del Señor."

Leer Más:  ¡No vayas solo! Dios nos creó para vivir en comunidad

Podemos aprender mucho de cómo Jesús manejó la situación. Jesús, de hecho, dio un ejemplo para Sus seguidores a lo largo de las edades.

Esto se nos recuerda por medio de las Escrituras: "Mucho tiempo se había perdido, y navegar ya se había vuelto peligroso porque para entonces era después del Día de la Expiación. Entonces Pablo les advirtió" (Hechos 27:9), y "El día diez de este séptimo mes es el Día de la Expiación. Celebren una asamblea sagrada y absténganse de comer, y presenten una ofrenda de comida al Señor" (Levítico 23:27).

4. El Ayuno es una Herramienta Espiritual

Por último, Jesús ayunó para prepararse para la batalla espiritual definitiva contra Satanás, que Satanás seguramente perdió. Esto se debe a que el ayuno es una herramienta espiritual que nos prepara espiritualmente y nos acerca a la fortaleza de Dios.

Es una forma de reconocer que nuestras fortalezas no son nuestras sino de Dios. Por lo tanto, esto es lo que Jesús también hizo mientras ayunaba. Es reconocer los mandamientos de Su Padre y sacar fuerzas de Su Padre (Isaías 58:6-14).

¿Por qué Importa Esto?

Hemos discutido cuatro razones principales por las que Jesús ayunó: la carne de Jesús estaba en su punto más débil, pero venció la tentación, demostró Su fe y, finalmente, el ayuno fue Su herramienta espiritual para sacar fuerzas de Su Padre en el cielo.

El ayuno fue, de hecho, parte del plan completo de nuestro Todopoderoso para salvarnos a través de Jesucristo, Su único Hijo engendrado. Fue parte de Su preparación espiritual y física. Este hecho nos acerca más a Jesús y enfatiza cuánto nos ama.

Leer Más:  ¿"En el mundo, pero no del mundo"? ¡Revisemos esta frase!

Preguntas Frecuentes

h3. ¿Por qué es importante el ayuno de Jesús?
Porque fue parte del plan de Dios para salvarnos a través de su Hijo, Jesús. Ayudó a Jesús a prepararse espiritual y físicamente para su batalla con Satanás.

h3. ¿Cuáles son las razones por las que Jesús ayunó?
1. Su carne estaba en su punto más débil.
2. Conquistó la tentación.
3. Demostró su fe hacia Dios.
4. El ayuno fue una herramienta espiritual para acercarse a la fuerza de Dios.

h3. ¿Cómo nos ayuda el ayuno de Jesús en nuestras propias vidas?
Nos da esperanza en nuestras propias tentaciones, nos recuerda que dependemos de Dios para nuestra fuerza y ​​nos anima a usar el ayuno como una herramienta espiritual para acercarnos a Dios.

Subir