Oraciones que transforman: el poder de orar con la Palabra de Dios
Conecta tu mente con las Escrituras
El grado en que nuestras mentes estén conformadas por la Palabra de Dios influye directamente en la eficacia de nuestras oraciones. Jesús afirmó: "Si permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que quieran, y les será concedido" (Juan 15:7).
Oraciones formuladas por Dios
Como dijo D. M. M'Intyre, Dios solo responde a las peticiones que su Hijo ha ayudado a formular. "Si pedimos algo según su voluntad, él nos oye" (1 Juan 5:14).
La práctica de la iglesia primitiva
La iglesia primitiva oraba con la Palabra de Dios. Por ejemplo, la oración de Hechos 4:24-30 cita el Salmo 2. Las oraciones del Antiguo Testamento, como la de Esdras en Nehemías 9:6-37, eran recitales de historia y textos bíblicos.
Método de oración con la Palabra
Orar con la Palabra implica leer o recitar las Escrituras con un espíritu de oración, permitiendo que su significado se convierta en nuestra oración e inspire nuestros pensamientos.
Variedad de enfoques
Existen múltiples formas de orar con la Palabra, no solo una. Se puede hacer individualmente o en grupo, pausando después de cada frase, oración, párrafo o capítulo.
Pasos para empezar
- Encuentra un momento y lugar tranquilos.
- Comienza con una breve oración, reconociendo tu necesidad de Dios y pidiendo que abra tus ojos a las maravillas de su Palabra (Salmo 119:18).
- Lee un capítulo de una carta bíblica rápidamente para comprender su contexto general.
- Si algún versículo te llama la atención, enfócate en él y deja que inspire tu oración.
- Lee el capítulo de nuevo, oración por oración, preguntándote cómo cada verso podría convertirse en una oración personal.
- Trata de incorporar formas bíblicas de hablar en tu mente y corazón, especialmente enriquecendo tu vocabulario de alabanza (los Salmos son útiles para esto).
- Si te encuentras con dificultades para entender, haz una nota mental para reflexionar y investigar más tarde.
Oraciones escriturales
Si te resulta difícil, comienza con la forma más sencilla: orar con oraciones de las Escrituras, como Hechos 4:24-30; Efesios 1:16-23; 3:14-19; Filipenses 1:9-11; Colosenses 1:9-14; 1 Tesalonicenses 3:11-13; Hebreos 13:20-21; Apocalipsis 4:8, 11; 5:9-10, 12-14, etc. Solo debes pretender ser el autor bíblico y leerlo como si fuera tuyo.
Oración por necesidades específicas
Si tienes preocupaciones específicas por las que orar, lee el capítulo por tercera vez buscando pistas sobre cómo orar por ellas.
Preguntas Frecuentes sobre Oración Bíblica
¿Por qué es importante orar con la Biblia?
Porque la medida en que nuestra mente está moldeada por las Escrituras determina la medida en que nuestras oraciones son respondidas (Juan 15:7).
¿Qué tipo de oraciones responde Dios?
Dios solo responde a las peticiones que su Hijo ha ayudado a formular (1 Juan 5:14).
¿Cómo oraban los primeros cristianos?
Los primeros cristianos oraban con las Escrituras, citando pasajes como el Salmo 2 (Hechos 4:24-30).
¿Qué significa "orar con la Palabra"?
Significa leer o recitar las Escrituras con un espíritu de oración, permitiendo que el significado de los versículos se convierta en nuestra oración e inspire nuestros pensamientos.
¿Cómo puedo orar con la Palabra?
Lee una sección de la Biblia y reflexiona sobre ella, haciéndote preguntas como: "¿Cómo podría este versículo aplicarse a mi vida como oración?".