La Importancia del Mandamiento Más Grande
El Mandamiento Más Grande
En las Escrituras, encontramos cientos de mandamientos que Dios nos pide que sigamos. El Talmud afirma que solo en la Torá hay 613 mandamientos. A lo largo de la Biblia, vemos órdenes sobre cómo debemos actuar y lo que debemos evitar. Algunos ejemplos son:
- "No cometerás adulterio" (Éxodo 20:14).
- "Porque yo te mando hoy que ames a Jehová tu Dios, que andes en sus caminos, y guardes sus mandamientos, sus estatutos y sus decretos, para que vivas y seas multiplicado, y Jehová tu Dios te bendiga en la tierra a la cual entras para tomarla en posesión" (Deuteronomio 30:16).
- "Esfuérzate y sé valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas" (Josué 1:9).
- "No tendrás dioses ajenos delante de mí" (Éxodo 20:2).
Sin embargo, de todos los mandamientos de las Escrituras, Jesús los resume en solo dos. En Mateo 22, leemos el siguiente diálogo entre un líder religioso y Jesús:
"Pero los fariseos, al oír que había hecho callar a los saduceos, se juntaron. Y uno de ellos, intérprete de la ley, preguntó por tentarle, diciendo: Maestro, ¿cuál es el gran mandamiento en la ley? Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas".
Jesús establece un principio fundamental aquí y declara con certeza que considera dos cosas como los mandamientos más importantes. Cita versículos de Deuteronomio 6:5 y Levítico 19:18.
Ambos versículos provienen de la Torá (los primeros cinco libros del Antiguo Testamento) y fueron escritos por Moisés. Los proclamó en nombre de Dios al pueblo de Israel como mandatos que debían seguir. Eran anclas para sus almas y brújulas morales en su viaje por la vida.
El Significado de los Mandamientos
¿Qué nos está diciendo Jesús aquí? ¿Cuál es la importancia de estas palabras en nuestras vidas hoy?
"Amarás a tu prójimo como a ti mismo" son las palabras repetidas por Jesús en el Nuevo Testamento, pero el versículo completo que se encuentra en Levítico dice: "No te vengarás, ni guardarás rencor a los hijos de tu pueblo, sino amarás a tu prójimo como a ti mismo. Yo Jehová".
Es importante señalar que en la cultura judía, memorizar las Escrituras era esencial, incluso hoy.
Si bien Jesús solo pronunció cinco palabras de ese versículo, cualquier judío que escuchara esas palabras habría recordado el versículo completo al instante.
Habrían sabido que Jesús también estaba implicando que evitar la venganza, no guardar rencor y amar a nuestro prójimo estaban intrínsecamente ligados. No eran mandatos separados, sino parte de un solo mandamiento dado al pueblo de Israel.
Cómo nos Ayudan estos Mandamientos Hoy
Cuando Jesús condensa todos los mandamientos en solo dos versículos, nos brinda un plan sobre cómo debemos vivir nuestras vidas. Simplifica el seguir a Dios en nuestra vida diaria y nos muestra cómo es posible obedecer todos los mandamientos.
Me llama la atención que Jesús se centre solo en dos aspectos: cómo amamos a Dios y cómo amamos a los demás. Me parece que Jesús está implicando que una relación no puede funcionar plenamente sin la otra.
La realidad de nuestras vidas es que es imposible amar a los demás, no solo a nuestros enemigos sino incluso a nuestros amigos, si no hemos establecido primero en nuestras vidas un amor profundamente arraigado por Dios.
De hecho, diría que es imposible hacer muchas cosas sin Dios en su lugar apropiado, incluida la crianza de los hijos, el matrimonio, el trabajo y la educación. Todo en nuestras vidas fluye en primer lugar de nuestra relación con Dios Padre.
Preguntas Frecuentes
¿Por qué son importantes los dos mandamientos más grandes?
Estos mandamientos resumen todos los demás mandamientos y nos proporcionan una guía sobre cómo vivir nuestras vidas, amando a Dios y a los demás.
¿Cómo nos ayuda el mandamiento de "Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón"?
Este mandamiento es la base de todas nuestras demás relaciones, ya que amar a Dios nos permite amar a los demás y vivir una vida centrada en Él.
¿Cómo podemos amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos?
Amar a nuestro prójimo implica tratarlos con respeto, compasión y amabilidad, incluso si no estamos de acuerdo con ellos o no nos agradan.
¿Qué significa "Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón"?
Significa dedicar completamente nuestras vidas, pensamientos y acciones a amar y servir a Dios.
¿Cómo podemos saber si estamos amando a Dios y a nuestro prójimo como deberíamos?
Debemos examinar regularmente nuestras vidas y ver si nuestras acciones y actitudes están alineadas con los principios de amar a Dios y a los demás.