¿Interfiere la medicina con el plan de Dios para mi sufrimiento?

Orar y recibir tratamiento: ¿Intromisiones en la soberanía divina?

Ante el sufrimiento, nos preguntamos si recurrir a la oración o a tratamientos médicos interfiere con la voluntad soberana de Dios. Sin embargo, las Escrituras nos guían para entender el papel de la intervención humana en relación con la soberanía divina.

Cinco principios bíblicos para navegar la intervención

  1. Orar por la voluntad de Dios: 2 Corintios 12:7-9 nos recuerda que Dios puede permitir el sufrimiento para nuestra santificación. Orar nos permite discernir su voluntad y confiar en su gracia sostenedora.

  2. Buscar ayuda en Dios primero: 2 Crónicas 16:12 muestra que desatender la ayuda de Dios en favor de recursos mundanos puede ser un error. Debemos priorizar la búsqueda de la guía y el auxilio divinos.

  3. Reconocer el valor de la medicina: Colosenses 4:14 y 1 Timoteo 5:23 indican que Dios valora la intervención médica y las terapias naturales. Estos recursos pueden ser vistos como dones de Dios para nuestro bienestar.

  4. Subyugar la tierra: Génesis 1:28 nos invita a utilizar nuestros recursos naturales para mejorar nuestra existencia. La medicina moderna es una expresión de esta comisión.

  5. La sumisión alegre a la voluntad de Dios: El objetivo final no es evitar la intervención sino someternos profundamente a la voluntad soberana de Dios. Ya sea a través de la oración, los milagros o la medicina, su voluntad se cumplirá.

Preguntas frecuentes sobre la medicina y la voluntad de Dios

¿Es un pecado usar medicina moderna para tratar enfermedades?

No necesariamente. El uso de la ciencia y la medicina humanas no determina si una acción es pecado o no. Lo que importa es nuestra actitud hacia Dios, la fe y el amor.

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¿Por qué no rezar o dejar que la enfermedad siga su curso si Dios la ha ordenado?

La oración y la intervención medicinal pueden formar parte del plan de Dios. Él nos invita a orar y nos ha provisto recursos para "someter" la tierra y hacerla más beneficiosa para nosotros.

¿Es un pecado no buscar la ayuda de Dios antes de tomar medicamentos o ir al médico?

Puede serlo si indica una falta de interés en buscar la ayuda de Dios, confiar en Él o amarle.

¿Qué diferencia hay entre los remedios naturales y los medicamentos modernos?

La línea entre ellos es borrosa. Lo importante es reconocer que Dios nos ha dado la capacidad de modificar la naturaleza para nuestro beneficio.

¿Qué busca Dios en nuestra respuesta al sufrimiento?

No la estrategia menos invasiva, sino la sumisión más profunda y alegre a su voluntad soberana, independientemente de cómo abordemos la enfermedad.

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