¿Importa a cuál persona de la Trinidad oramos?
El patrón bíblico
Aunque no es una cuestión de condenación, sí creemos que es importante a quién oramos. Según las Escrituras, el patrón general es orar al Padre en el nombre del Hijo por el poder del Espíritu Santo.
El Espíritu Santo glorifica al Hijo llevándonos a Él y haciéndonos ver que solo por Él podemos acercarnos al Padre. El Hijo murió por nuestros pecados para reconciliarnos con Dios.
Excepciones ocacionales
Si bien el patrón es orar al Padre, ocasionalmente encontramos oraciones dirigidas a otras personas de la Trinidad. Por ejemplo:
- "Ven, Espíritu Santo"
- "¡Maranatha! ¡Señor Jesús, ven!"
- "Espíritu Santo, desciende sobre nosotros y concédenos un nuevo bautismo"
Estas oraciones no son incorrectas, sino que expresan nuestro amor y gratitud hacia el Espíritu Santo y el Hijo.
En resumen, es importante seguir el patrón bíblico de orar al Padre en el nombre del Hijo por el poder del Espíritu. Sin embargo, ocasionalmente podemos expresar nuestro cariño a otras personas de la Trinidad mediante oraciones específicas.
Preguntas Frecuentes
¿Es importante a qué Persona de la Trinidad rezamos?
Sí, el autor cree que sí importa, aunque equivocarse no constituye un pecado condenable ni siquiera un pecado.
¿Cuál es el patrón bíblico para la oración?
El patrón bíblico es orar al Padre en el nombre del Hijo por el poder del Espíritu Santo.
¿Por qué oramos al Padre en el nombre de Jesús?
Oramos al Padre en el nombre de Jesús porque su sangre y justicia hacen posible nuestro acceso a Dios.
¿Podemos orar al Espíritu Santo?
"Ven, Espíritu Santo" no es una oración pecaminosa. Sin embargo, orar habitualmente al Espíritu Santo como nuestro Benefactor estaría fuera del patrón bíblico.
¿Es aceptable orar ocasionalmente a otras Personas de la Trinidad?
Sí, oraciones como "¡Maranatha! ¡Señor Jesús, ven!" y "Espíritu Santo, desciende sobre nosotros y concédenos un nuevo bautismo" son apropiadas para expresar amor y anhelo por las demás Personas.
