¿Estaba Dios con los israelitas en el desierto?
La prueba en Refidim
En el desierto de Refidim, el pueblo de Israel experimentó una intensa sed. Sus quejas y murmuraciones contra Moisés llegaron a tal punto que amenazaron con apedrearlo. Desesperado, Moisés clamó a Dios por ayuda.
La respuesta de Dios
Dios instruyó a Moisés para que reuniera a los ancianos y llevara su vara. Luego, le prometió que se encontraría con él en una roca en Horeb. "¡Golpea la roca y brotará agua!", le dijo Dios.
El agua de la roca
Ante la mirada de los ancianos, Moisés golpeó la roca y salió agua en abundancia. El pueblo pudo saciar su sed, y el lugar fue llamado Masah y Meriba (Prueba y Riña).
El significado de la prueba
Este episodio tuvo un significado profundo para los israelitas. No solo demostró el poder de Dios para proveer, sino que también reveló la tendencia del pueblo a poner a prueba su presencia y autoridad. Al quejarse y cuestionar a Dios, lo estaban tentando.
¿Estaba Dios con los israelitas?
La provisión de agua en Refidim fue una señal inconfundible de que Dios estaba con los israelitas. A pesar de sus dudas y pruebas, Él permaneció fiel a su convenio y los guió y protegió durante su viaje por el desierto.
¿Por qué los israelitas se quejaron contra Moisés?
Moisés respondió que se quejaban contra él y estaban poniendo a prueba a Dios porque no tenían agua para beber (Éxodo 17:2).
¿Cuál fue la respuesta de Dios a las quejas de los israelitas?
Dios le dijo a Moisés que fuera ante el pueblo con algunos de los ancianos de Israel y que llevara la vara con la que había golpeado el Nilo (Éxodo 17:5-6).
¿Qué sucedió cuando Moisés golpeó la roca?
Cuando Moisés golpeó la roca, salió agua y el pueblo pudo beber (Éxodo 17:6).
¿Qué nombre le dio Moisés al lugar?
Moisés llamó al lugar Massah y Meribah, que significan "prueba" y "queja", respectivamente (Éxodo 17:7).