El uso inadecuado de palabrotas en el lenguaje cristiano

El dilema de las palabras ofensivas

Un oyente del podcast, llamado Sam, expresó su preocupación sobre el uso de palabras ofensivas por parte de algunos cristianos, incluso predicadores. Los ejemplos mencionados incluían "shoot", "crud", "dang", "crap", "friggin'" y otras. Sam se pregunta cómo deben reaccionar los cristianos al escuchar estas palabras en el púlpito.

La postura bíblica

El pastor John Piper se alinea con Sam y considera que esta tendencia es inaceptable. Argumenta que no es bíblica y tiene raíces pecaminosas. Sin embargo, reconoce que existen algunas excepciones en situaciones de conflicto extremo, donde el lenguaje severo puede estar justificado.

El principio de un lenguaje apropiado

Piper cita Efesios 5:3-5 para ilustrar que la pureza de corazón y de manos debe ir acompañada de la pureza de la lengua. Sostiene que es incorrecto verbalizar acciones que son pecaminosas o impuras.

El problema de la falta de autenticidad

Piper señala que el uso de palabrotas a menudo se hace de manera superficial, sin un sentimiento genuino de ofensa. Sugiere que aquellos que usan este lenguaje no toman en serio las realidades que están expresando.

Motivaciones subyacentes

Piper identifica diversas motivaciones detrás del uso de un lenguaje cuestionable por parte de los líderes cristianos. Éstas incluyen:

  • Debilidad que busca apoyo
  • El deseo de parecer mundanos y sabios
  • El temor de ser etiquetado como puritano o legalista

Recomendaciones

Piper desalienta a los pastores del uso habitual de un lenguaje cuestionable. Recomienda que:

  • Se adhieran a un estándar de pureza y propiedad
  • Eviten el comportamiento arrogante que ofende las normas culturales establecidas
  • Sean humildes y conscientes de sus limitaciones
  • Prioricen la autenticidad y la sinceridad en su comunicación
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¿Cómo reaccionan los cristianos a las groserías o lenguaje obsceno en el púlpito?

Sam, un oyente del podcast, escribió una carta expresando su preocupación por el uso de lenguaje ofensivo por parte de algunos cristianos y predicadores. Preguntó cómo deberían reaccionar los cristianos ante estas palabras cuando se escuchan en el púlpito.

Argumentos en contra de las groserías

  • El lenguaje cortés y respetuoso es apropiado entre los santos (Efesios 5:3).
  • El lenguaje sucio o grosero está fuera de lugar y es inapropiado para los cristianos (Efesios 5:4).
  • Un corazón y manos puros deben ir acompañados de una lengua pura (Efesios 5:3-5).

Argumentos a favor de un lenguaje más severo

  • Jesús y Pablo usaron un lenguaje severo contra sus adversarios en ciertas situaciones (Filipenses 3:2, Gálatas 5:12, Mateo 23:33).
  • Sin embargo, el uso de este lenguaje no era cavalier o jocoso, sino que tenía un propósito serio y apropiado.

Problemas con el uso común de groserías

  • Puede indicar orgullo y una necesidad de ser visto como experimentado en el mal.
  • Puede provenir del miedo a ser etiquetado como puritano o legalista.
  • No está en consonancia con el llamado a ser "niños en maldad" (1 Corintios 14:20).

El uso común y ordinario de lenguaje cuestionable por parte de los pastores es desalentado por las siguientes razones:

  • No es apropiado entre los santos.
  • Está fuera de lugar y es inapropiado para los cristianos.
  • No está en consonancia con un corazón, manos y lengua puros.
  • Puede indicar orgullo y miedo a ser etiquetado como puritano.

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