¡El Rey Confía en Dios y Es Invencible!
La Alegría de la Victoria
El rey se regocija inmensamente en la fuerza divina, y su corazón se llena de alegría por la salvación que Dios le ha concedido. El Señor cumple sus deseos más profundos y satisface sus peticiones.
Bendiciones y Honor
Dios saluda al rey con bendiciones de bondad y coloca una corona de oro puro sobre su cabeza. Le otorga una vida larga y eterna, y su gloria se engrandece gracias a la salvación divina. El Señor lo hace infinitamente dichoso y lo colma de alegría con su presencia.
Protección y Justicia
El rey confía plenamente en Dios, y gracias a la misericordia del Altísimo, permanece inquebrantable. La mano de Dios somete a los enemigos del rey, y su ira los consume como un horno ardiente. Dios destruye a su descendencia y acaba con sus planes malvados.
Exaltación y Alabanza
Dios humilla a los enemigos y apunta sus flechas hacia sus rostros. Por lo tanto, el rey invita a exaltar al Señor en su propio poder. Canta y alaba la fuerza divina, reconociendo la victoria que Dios le ha otorgado.
Preguntas Frecuentes sobre el Salmo 21
¿Quién es el rey en este salmo?
El salmo se refiere al rey David, un rey de Israel conocido por su fe y victoria sobre sus enemigos.
¿Por qué el rey se regocija en la fuerza de Dios?
El rey reconoce que su fuerza y salvación provienen de Dios, y se regocija en la protección y el favor de Dios.
¿Qué le ha dado Dios al rey?
Dios le ha dado al rey sus deseos, le ha concedido una larga vida y lo ha bendecido con honor y gloria.
¿Cómo demuestra el rey su confianza en Dios?
El rey confía en la misericordia de Dios y cree que Dios lo protegerá de sus enemigos.
¿Qué les sucederá a los enemigos del rey?
Dios castigará a los enemigos del rey, destruyendo su descendencia y consumiéndolos con fuego.
¿Qué le pide el salmista a Dios?
El salmista le pide a Dios que se exalte en su propio poder y que les permita a ellos cantar y alabar su fuerza.
