El renacimiento de tus cuerpos mortales: Una promesa para los que tienen el Espíritu de Dios
La seguridad de la resurrección
Si el Espíritu de quien resucitó a Jesús habita en ti, Él también revitalizará tu cuerpo mortal. Esta promesa divina no es una mera esperanza, sino una realidad que asegura la resurrección de nuestros seres físicos.
¿Cómo recibir el Espíritu Santo?
Para experimentar la resurrección, debemos recibir el Espíritu Santo. Esto se logra mediante el arrepentimiento, el bautismo y la fe en Jesucristo. Al confiar en Él, recibimos el Espíritu que nos capacita para vivir una vida agradable a Dios y nos garantiza la resurrección eterna.
Las implicaciones prácticas de la resurrección
La promesa de la resurrección tiene profundas implicaciones para nuestra vida diaria:
Dios se preocupa por tu cuerpo
Dios creó nuestros cuerpos con un propósito, no para el pecado sino para su gloria. Los revitalizará y los transformará para que reflejen la imagen de Jesús.
La resurrección brinda fortaleza para amar
La esperanza de la resurrección nos proporciona la motivación y la fuerza para perseverar en el amor y el servicio a los demás, sabiendo que nuestras obras serán recompensadas en la eternidad.
El Espíritu Santo es la garantía de nuestra resurrección futura. Al recibirlo y vivir de acuerdo con sus enseñanzas, podemos abrazar la promesa de cuerpos renovados y una vida eterna en presencia de Dios.