¡El misterioso maná y las codornices del cielo!

El lamento del pueblo

En medio de su travesía, el pueblo de Israel comenzó a quejarse amargamente por las penurias del viaje. Sus lamentos llegaron a oídos del Señor, quien, enfurecido, envió un fuego que consumió a parte del pueblo en las afueras del campamento. Al ver esto, los israelitas clamaron a Moisés por ayuda, y gracias a su intercesión, el fuego se extinguió.

El anhelo por Egipto

Luego, un grupo de extranjeros que viajaban con los israelitas anheló los manjares de Egipto. El pueblo de Israel también se unió a sus quejas, exclamando: "¡Oh, por carne! ¡Recordamos el pescado que comíamos gratis en Egipto, y las abundantes verduras y frutas!".

El maná como sustento

En respuesta a sus lamentos, el Señor envió maná, un alimento milagroso que parecía semillas de cilantro y tenía un color amarillo pálido. El pueblo lo recogía del suelo, lo molía y lo preparaba en tortas que sabían como pasteles horneados con aceite de oliva.

La ira de Dios

Sin embargo, a pesar de este sustento, el pueblo continuó quejándose. La paciencia de Dios se agotó, y su ira se encendió contra ellos. Moses, abrumado por la carga de liderar al pueblo, se lamentó ante el Señor, preguntándole por qué lo trataba con tanta dureza.

La promesa de carne

Ante la desesperación de Moisés, el Señor le ordenó reunir a setenta ancianos y líderes que estarían investidos con el mismo Espíritu Santo que él. Estos ancianos compartirían la carga de liderar al pueblo. Además, el Señor prometió que al día siguiente enviarían codornices, aves que les proporcionarían la carne que tanto anhelaban.

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La abundancia de codornices

Como el Señor había prometido, envió una gran cantidad de codornices que cubrieron el campamento durante días. El pueblo se deleitó con la carne, pero su alegría duró poco. Mientras aún estaban saciados, la ira de Dios se desató nuevamente sobre ellos por su falta de gratitud.

Las graves consecuencias

El lugar donde murieron los israelitas debido a su glotonería se llamó Kibrot-hattaavah, que significa "tumbas de la gula". La tragedia sirve como advertencia de las graves consecuencias de la desobediencia y la ingratitud hacia Dios.

Preguntas Frecuentes

¿Por qué el Señor envió fuego contra el pueblo?

Porque se quejaron y se rebelaron contra Él por las dificultades que enfrentaban. (v. 1)

¿Por qué el Señor envió maná?

Para alimentar al pueblo, ya que estaban cansados de comer solo maná. (v. 5-7)

¿Por qué el Señor dijo que les daría carne durante un mes?

Para castigarlos por sus quejas y su deseo de regresar a Egipto. (v. 19-20)

¿Por qué el Señor puso su Espíritu sobre los ancianos?

Para que ayudaran a Moisés a llevar la carga de liderar al pueblo. (v. 16-17)

¿Por qué el Señor envió codornices al campamento?

Para satisfacer el hambre del pueblo, pero también para castigarlos por su glotonería y falta de agradecimiento. (v. 31-34)

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