El lamento de los exiliados en Babilonia

La nostalgia atormenta el alma

A orillas de los ríos babilónicos, tristes y nostálgicos, lloramos al recordar a Jerusalén. Nuestros instrumentos musicales, otrora fuente de alegría, colgados de los sauces, permanecían silenciosos. Allí, nuestros captores nos demandaban cantos, burlándose de nuestro dolor: "Cantadnos una canción de Sión".

¿Cómo podríamos entonar las melodías del Señor en tierra extraña? Nuestra memoria, implacable, nos atormentaba con el recuerdo de Jerusalén. Juramos que si la olvidáramos, nuestras habilidades se marchitarían y nuestra lengua se pegaría al paladar. Jerusalén, por encima de cualquier placer, era nuestra máxima exaltación.

La ira y la venganza

Invocamos la ira del Señor sobre Edom, que se había regocijado ante la caída de Jerusalén. Su maldad pedía venganza. También contra Babilonia, la desoladora, anunciamos nuestro deseo de retribución. ¡Bendito sería quien la destruyera como ella nos había destruido, quien aplastara a sus niños contra las rocas!

La esperanza en medio de la aflicción

A pesar de la desolación y el dolor, un atisbo de esperanza se aferraba a nuestros corazones. Creíamos que el Señor no nos abandonaría. Recordaríamos a Jerusalén, y en nuestra memoria, su gloria nunca se extinguiría.

Preguntas Frecuentes

¿Quiénes son "nosotros" en el Salmo 137?

Los "nosotros" en el Salmo 137 son los exiliados judíos que fueron llevados cautivos a Babilonia después de la destrucción de Jerusalén.

¿Por qué lloraban los exiliados?

Los exiliados lloraban porque recordaban a Sión (Jerusalén) y su antigua vida allí.

¿Quiénes les pidieron a los exiliados que cantaran?

Los que les pidieron a los exiliados que cantaran fueron sus captores babilonios.

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¿Por qué se negaron los exiliados a cantar?

Los exiliados se negaron a cantar porque se sintieron traicionados y tristes por la destrucción de Jerusalén.

¿Qué juramento hicieron los exiliados?

Los exiliados juraron recordar a Jerusalén y ponerla por encima de todo lo demás.

¿A quién invoca el salmista en busca de venganza?

El salmista invoca a Dios para que se vengue de los edomitas, quienes habían alentado a los babilonios a destruir Jerusalén.

¿Qué pide el salmista que se haga a los hijos de Babilonia?

El salmista pide que los hijos de Babilonia sean aplastados contra las rocas como venganza por el trato que le dieron a los exiliados judíos.

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