¡Dios te quiere como eres!
Enfócate en tu propio llamado
Dios te creó con un propósito único y te llamó a seguirlo. No te compares con los demás, ya que cada uno tiene su función específica en el cuerpo de Cristo. Céntrate en el llamado que Dios te ha dado y vive la vida que él te ha asignado.
Libertad de la comparación
La naturaleza caída dentro de nosotros nos lleva a compararnos con los demás y a sentir envidia. Sin embargo, la Palabra de Dios nos libera de esta tiranía. Jesús murió para darnos verdadera libertad, incluso de la comparación pecaminosa. Recuerda que Dios te creó con un diseño único y te quiere como eres.
Confianza en Dios
Dios te conoce íntimamente y es consciente de tus debilidades. Sin embargo, no te llama a ser alguien diferente ni a seguir el camino de otro. Confía en que su gracia es suficiente para el camino que te ha dado. Cuando fijas tus ojos en Jesús y sigues su llamado, descubres tu verdadero yo.
Servicio amoroso
Tu autenticidad no radica en la autoevaluación o en la comparación con los demás. Eres más genuino cuando te centras en Jesús, sirves a los demás con amor y utilizas los dones que Dios te ha otorgado.
Exaltación en el momento adecuado
Cuando te humillas ante Dios y confías en que él redimirá tus sufrimientos y debilidades, él te exaltará en el momento oportuno y de la manera que le dará más gloria y a ti más alegría. No te preocupes por los demás, sigue a Jesús y deja que él guíe tu vida.
¿Por qué Dios me ha llamado específicamente a mí?
Dios te creó y te llamó a seguirlo con un propósito específico. Estás diseñado a medida para tu vocación.
¿Por qué mi vocación parece más difícil que la de los demás?
No te desanimes. Dios quiere que te centres en seguirlo a ti, no en comparar tu camino con el de los demás.
¿Qué significa "seguir a Jesús"?
Seguir a Jesús implica confiar en él, obedecer sus mandamientos y servir a los demás con los dones que te ha dado.
¿Debería preocuparme por la forma en que Dios trata a los demás?
No te centres en cómo Dios trata a los demás. Concéntrate en tu propio camino y confía en que Dios tiene un plan para cada uno.
¿Puedo ser mi verdadero yo cuando sigo a Jesús?
Sí. Tu verdadero yo es cuando fijas tus ojos en Jesús y lo sigues con fe.
¿Cómo puedo lidiar con las dificultades y debilidades en mi vida?
Confía en que Dios te fortalecerá a través de las dificultades y te equipará con su gracia cuando la necesites.