¡Construyamos juntos una comunidad espiritual sólida!
El llamado a la consideración y la unidad
Como seguidores de Cristo, tenemos el deber de ser considerados con los demás, especialmente con aquellos que tienen sensibilidades diferentes. Evitemos el egoísmo y centrémonos en ayudar a los demás a crecer en el Señor. Recuerda el ejemplo de Cristo, quien antepuso las necesidades de los demás a las suyas.
Fortaleciendo la fe y la esperanza
Las Escrituras nos enseñan la importancia de apoyarnos mutuamente en nuestro caminar espiritual. Compartamos nuestras experiencias, animemos a los que flaquean y esperemos pacientemente las promesas de Dios. Al hacerlo, construiremos una comunidad sólida y llena de esperanza.
Aceptándonos unos a otros
Cristo nos aceptó incondicionalmente, por lo que también debemos aceptarnos unos a otros. Reconozcamos las diferencias como fortalezas y trabajemos juntos para glorificar a Dios.
Extendiendo el alcance del Evangelio
Dios nos ha llamado a compartir el Evangelio con todas las naciones. Siguiendo el ejemplo de Cristo, prediquemos el mensaje de salvación tanto a judíos como a gentiles, para que todos puedan experimentar la gracia de Dios.
Confiando en la guía del Espíritu Santo
El Espíritu Santo es nuestro guía y consejero. Confiemos en su poder para llenarnos de gozo, paz y esperanza. Su presencia nos capacitará para superar los desafíos y vivir en armonía unos con otros.
Apoyando a los necesitados
Como creyentes, tenemos la responsabilidad de cuidar a los menos afortunados. Participemos en actividades de servicio y donemos generosamente para apoyar a aquellos que lo necesitan.
Orando por la protección y la unidad
Oremos por la protección de Dios contra aquellos que se oponen a nuestra fe. Oremos también por la unidad entre los creyentes para que presentemos un frente unificado ante el mundo.
Preguntas Frecuentes
¿Qué se nos insta a hacer como cristianos fuertes?
- Ser considerados con aquellos que son sensibles.
- Ayudar a otros a hacer lo correcto y edificarlos en el Señor.
¿A quién debemos imitar en nuestro comportamiento?
- A Cristo, quien no vivió para agradarse a sí mismo.
¿Qué nos enseñan las Escrituras sobre las dificultades que enfrentamos?
- Nos dan esperanza y aliento al esperar pacientemente las promesas de Dios.
¿Qué debemos hacer para vivir en armonía unos con otros?
- Aceptar a los demás tal como Cristo nos aceptó.
- Dar alabanza y gloria a Dios con una sola voz.
¿Por qué debemos recibir a los demás como Cristo nos recibió?
- Para que Dios sea glorificado.
¿Cuál fue el propósito de la venida de Cristo a los judíos y gentiles?
- Mostrar la fidelidad de Dios a las promesas hechas a los antepasados judíos.
- Permitir que los gentiles den gloria a Dios por su misericordia hacia ellos.
¿Qué pide Pablo a los creyentes que hagan?
- Unirse a su lucha orando a Dios por él.
- Aceptar la donación que lleva a Jerusalén.