El problema de los entrometidos
La palabra “entrometido” describe a alguien que se involucra innecesariamente en los asuntos de los demás. En la Biblia, este comportamiento es condenado con palabras fuertes.
Pasajes bíblicos sobre los entrometidos
En 2 Tesalonicenses 3:11-12, Pablo condena a los “entrometidos” como “ociosos” y “traviesos”. Instruye a los cristianos que los eviten y los animen a trabajar para su propio sustento.
En 1 Timoteo 5:13, Pablo también advierte sobre las viudas jóvenes que se vuelven “entrometidas”, hablando mal y chismeando.
En 1 Pedro 4:15, Pedro incluye a los “entrometidos” en la misma categoría que los asesinos y ladrones, afirmando que no deben sufrir por tales acciones.
La gravedad del chisme
La Biblia considera el chisme y la intromisión como pecados graves. Son actos que violan el mandamiento de amar a nuestro prójimo (Mateo 22:39).
El chisme daña tanto al que lo cuenta como al que lo escucha. Puede destruir reputaciones, sembrar discordia y erosionar la confianza.
Cómo evitar la intromisión
Es importante reconocer que la inseguridad personal puede llevar a la intromisión. Los entrometidos pueden sentir que necesitan estar involucrados en todo para sentirse importantes o necesitados.
Para evitar la intromisión, debemos:
- Examinar nuestros motivos.
- Preguntarnos si nos han invitado a opinar.
- Considerar si nuestra participación es beneficiosa.
- Mantener la confidencialidad.
La Biblia condena el chisme y la intromisión como pecados graves. Debemos evitar involucrarnos en los asuntos de los demás a menos que seamos invitados o seamos llamados por el Señor. Al hacerlo, honramos a Dios y protegemos la armonía de nuestras relaciones.
Preguntas frecuentes
¿Qué dice la Biblia sobre ser un entrometido?
La Biblia condena el comportamiento de los entrometidos, describiéndolos como ociosos e intrusivos. Exhorta a los cristianos a evitar tales acciones y a ocuparse de sus propios asuntos.
¿Cómo se define a un entrometido?
La palabra griega “periergos”, utilizada en la Biblia para describir a los entrometidos, se refiere a alguien que se ocupa de trivialidades y se entromete en los asuntos de los demás.
¿Qué consecuencias trae ser un entrometido?
La Biblia equipara el entrometimiento con el asesinato y el robo, considerándolo un pecado grave. Sufre la reprensión del Señor y puede dañar las relaciones y crear conflictos.
¿Cómo podemos distinguir la ayuda genuina del entrometimiento?
Es importante examinar nuestras motivaciones y si nuestra participación es solicitada y beneficiosa. Debemos evitar involucrarnos en asuntos personales sin ser invitados y respetar la privacidad de los demás.
¿Qué consejo bíblico podemos seguir para evitar el entrometimiento?
La Biblia nos exhorta a “seguir la paz con todos” (Romanos 12:18), “ocuparse de nuestros propios asuntos” (1 Tesalonicenses 4:11) y “guardar los secretos” (Proverbios 11:13).
