¡Cómo tener seguridad en la salvación!
La seguridad en la salvación: un regalo divino
La falta de seguridad en la salvación es una desafortunada dolencia común entre los cristianos. Cuando nuestros pecados pasados y dudas presentes se confabulan, nuestros espíritus se vuelven vulnerables a las tentaciones del enemigo. Aunque estamos salvados y guardados para siempre por Dios, creemos falsamente que no lo estamos.
La falta de seguridad no es necesariamente pecaminosa a menos que conozcas la verdad y la resistas o la rechaces. Por lo general, se debe a un malentendido sobre la salvación de Dios o a malas enseñanzas. La buena noticia es que puedes experimentar la seguridad de Dios en la vida eterna.
Basada en las promesas de Dios
Filipenses 1:6 afirma: "Estoy convencido de que Dios, que comenzó una buena obra en ustedes, la completará hasta el día de Cristo Jesús".
Esta afirmación de fe se basa en las siguientes verdades:
- Seguridad: Pablo tenía seguridad en la salvación de los filipenses.
- Autor: Dios comenzó la buena obra.
- Beneficiarios: En ellos, en sus propias vidas.
- Completitud: Dios completará la obra iniciada.
- Plazo: Hasta el día de Jesucristo, cuando se manifestará plenamente la salvación.
Basada en la persona de Cristo
Cuando Pablo afirma que Dios completará la obra, enfatiza que la salvación no solo procede de Dios sino que está en Cristo.
El Pacto de gracia de Dios es un vínculo sagrado en sangre que declara que "lo que Dios requiere, Dios lo provee" en la persona de su Hijo, nuestro Salvador Jesucristo.
- Justicia: Cristo es nuestra justicia, cubriendo nuestros pecados con su vida y sacrificio perfectos.
- Sustituto: Cristo tomó nuestro lugar, soportando el castigo que merecíamos por nuestros pecados.
- Abogado y Sumo Sacerdote: Cristo nos representa ante el Padre, intercediendo y haciendo expiación por nosotros.
Si Dios comenzó la buena obra en ti, la única forma de perder la salvación que Él ganó para ti sería retroceder en el tiempo: Cristo tendría que descender de su ascensión, volver a la tumba y ser crucificado nuevamente. Esto es absurdo. Cristo murió por nuestros pecados de una vez por todas y no romperá su palabra ni revertirá el sacrificio de su Hijo.
Basada en el poder del Espíritu Santo
Pablo confiaba en la perseverancia de los santos en Filipos porque el Espíritu de Dios garantizaba preservarlos.
- Promesa del Padre: Dios hizo un pacto con el Hijo para salvarte antes de la fundación del mundo.
- Misión del Hijo: Jesucristo vivió la vida que tú no podías y murió la muerte que debería haber sido tuya.
- Papel del Espíritu Santo: Procede del Padre y del Hijo y cumple el plan divino de Dios. El Espíritu obra activamente en tu vida, haciendo que todas las cosas cooperen para llevarte a casa con el Señor.
Si la salvación dependiera de tus esfuerzos, tus derechos como hijo o hija se basarían en documentos falsos. Pero como fuiste salvo por Dios, también estás sellado por Él.
Estás seguro. Y Dios hará que todas las cosas obren para tu bien.
Las promesas del Padre, la persona del Hijo y el poder del Espíritu Santo constituyen un vínculo irrompible que garantiza tu salvación. Este es el regalo de Dios para ti. Puedes tener seguridad de la vida eterna al recibir a Jesucristo como tu Señor y Salvador resucitado y viviente, confiando no en tus emociones o circunstancias, sino en el pacto de gracia inquebrantable que dice: "Lo que Dios comienza, Dios lo completa".
Preguntas Frecuentes
¿Cómo puedo tener seguridad de mi salvación?
Puedes tener seguridad de tu salvación creyendo que no es tu propia obra, sino un acto de redención de Dios en Jesucristo, concebido antes de la fundación del mundo en un pacto sagrado entre las Personas del Dios Trino y llevado a cabo por Dios a través de los misterios de Su providencia en tiempo real.
¿Una vez salvado, siempre salvado?
No tener seguridad en la salvación es, lamentablemente, una patología común del alma cristiana. Especialmente cuando nuestros pecados pasados conspiran con nuestras dudas presentes, nuestros espíritus son vulnerables a la opresión diabólica. En resumen, aunque estemos salvados y protegidos para siempre por Dios, creemos la mentira de que no lo estamos.
¿La falta de seguridad es necesariamente pecaminosa?
No necesariamente, a menos que conozcas la verdad y te resistas o la rechaces. Por lo general, la falta de seguridad es un malentendido de la salvación de Dios o el triste resultado de una mala enseñanza. La Buena Nueva es que puedes conocer la seguridad de Dios de la vida eterna.
¿Por qué puedo tener seguridad de la vida eterna?
Puedes tener seguridad de la vida eterna porque la salvación no es tu propia obra, sino un acto de redención de Dios en Jesucristo. Las promesas de Dios, la persona de Cristo y el poder del Espíritu Santo constituyen un vínculo inquebrantable que garantiza tu salvación. Dios te ha salvado por medio de Cristo y te ha sellado con Su Espíritu, dándote la seguridad de que nada podrá separarte de Su amor.