Cómo recordar el día de reposo para santificarlo

Recordando el día de reposo

La Biblia nos exhorta en Éxodo 20:8 a "recordar el día de reposo y santificarlo". Este mandamiento, dado a los israelitas después de su liberación de la esclavitud en Egipto, representaba un privilegio especial de descanso y renovación.

¿Qué es el día de reposo y qué lo hace santo?

El día de reposo es un día de descanso que sigue a seis días de trabajo. En el Antiguo Testamento, Dios estableció que comenzara el viernes al atardecer y terminara el sábado al atardecer. La mayoría de los cristianos hoy celebran el día de reposo el domingo, ya que es el día de la resurrección de Jesús.

La palabra "santo" significa consagrar o apartar, lo cual es precisamente lo que Dios hizo con el día de reposo. Lo separó como un día especial de bendición (Éxodo 20:11). Esta bendición se basa en la gracia de Dios, recordando a los israelitas que ya no eran esclavos de los hombres, sino que estaban apartados por Dios. A través del día de reposo, Dios les mostró (y nos muestra hoy) cómo deben vivir las personas libres: trabajar seis días y descansar uno.

¿Por qué recordar el día de reposo?

El día de reposo refleja la historia de la creación en Génesis 1, donde Dios, que no descansa ni duerme, escogió cesar de trabajar. No dejó de crear porque estuviera cansado, sino para mostrarnos la importancia de incorporar un ritmo de descanso y restauración en nuestras vidas diarias.

Entre otras razones para guardar el día de reposo están:

  • Acercamiento a Dios: Ofrece nuevas oportunidades para acercarnos a Dios, que quizás no tengamos durante la semana.

  • Recordatorio de nuestras limitaciones: Nos recuerda que somos humanos y tenemos limitaciones.

  • Restauración: Calma la sobreestimulación de la mente y el cuerpo que se acumula durante la semana.

  • Servicio: Nos refresca para que podamos refrescar a otros en la semana siguiente y servir a Dios con más plenitud.

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Formas prácticas de recordar el día de reposo

  • Comienza poco a poco: No te sientas culpable si tienes dificultades para recordar el día de reposo. Recuerda que "ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús" (Romanos 8:1).

  • Tiempo en familia: Dedica tiempo de calidad a tu familia.

  • Comparte y ora: Reserva un momento para que todos en casa respondan a estas preguntas: ¿Cómo será tu próxima semana? ¿Hay algo en lo que pueda ayudarte? ¿Cómo puedo orar por ti?

  • Descansa en la suficiencia de Dios: Cree que lo que logres en seis días de trabajo, dentro o fuera de casa, es suficiente.

  • Recibe la bendición: Al igual que en los tiempos de Jesús, muchas reglas humanas han secuestrado la simplicidad y la alegría de recordar el día de reposo.

Preguntas frecuentes sobre cómo recordar el día de reposo para santificarlo

¿Qué es el día de reposo?

El día de reposo es un día de descanso que sigue a seis días de trabajo. En el Antiguo Testamento, Dios declaró que comenzaba el viernes al atardecer y terminaba el sábado al atardecer. Hoy en día, la mayoría de los cristianos celebran el día de reposo el domingo porque es el día de la resurrección de Jesús.

¿Qué significa santificar el día de reposo?

Santificar el día de reposo significa dedicarlo a Dios y apartarlo de las actividades laborales regulares. Es un día para descansar, adorar y conectarse con Dios.

¿Por qué es importante recordar el día de reposo?

Recordar el día de reposo es importante porque:

  • Nos recuerda el relato de la creación, donde Dios descansó después de seis días de trabajo.
  • Nos ayuda a confiar en Dios y a reconocer nuestros límites humanos.
  • Nos refresca física, mental y espiritualmente.
  • Nos da la oportunidad de acercarnos a Dios y adorarlo.
  • Nos recuerda que Dios provee y no estamos obligados a trabajar sin descanso.
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¿Cómo podemos recordar el día de reposo?

Aquí tienes algunas formas prácticas de recordar el día de reposo:

  • Prioriza el descanso y la adoración.
  • Pasa tiempo de calidad con tu familia.
  • Tómate tiempo para orar y leer la Biblia.
  • Participa en actividades que te nutran espiritualmente.
  • Establece límites y di "no" a las actividades que te distraigan de descansar.
  • Recibe la bendición de Dios al confiar en su soberanía.

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