Cómo orar según la enseñanza de Jesús
En el evangelio de Lucas, Jesús provee una guía para la oración efectiva. Sus enseñanzas nos ayudan a comprender cómo acercarnos a Dios y qué pedirle.
La Oración del Padre Nuestro
Estructura
Jesús enseñó a sus discípulos a orar la siguiente oración, conocida como el Padre Nuestro:
"Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. Venga tu reino. Hágase tu voluntad, así en la tierra como en el cielo. Danos hoy el pan nuestro de cada día. Perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros deudores. No nos metas en tentación, sino líbranos del mal".
Significados
Cada frase del Padre Nuestro tiene un significado profundo:
- "Padre nuestro": Reconoce a Dios como nuestro Padre amoroso y protector.
- "Santificado sea tu nombre": Expresa nuestro deseo de honrar y glorificar a Dios.
- "Venga tu reino": Oramos por la llegada del reino de Dios, donde su voluntad se hará perfectamente.
- "Hágase tu voluntad": Nos sometemos a la voluntad de Dios, reconociendo su sabiduría y poder.
- "Danos hoy el pan nuestro de cada día": Pedimos provisión física y sustento diario.
- "Perdónanos nuestras deudas": Buscamos el perdón de Dios por nuestros pecados.
- "No nos metas en tentación": Oramos para que Dios nos proteja de las pruebas y tentaciones que puedan llevarnos al pecado.
- "Líbranos del mal": Pedimos protección contra las fuerzas del mal que nos amenazan.
Elementos Esenciales de la Oración
Humildad
La oración debe hacerse con un corazón humilde, reconociendo nuestra dependencia de Dios.
Fe
Debemos creer que Dios puede y quiere escuchar nuestras oraciones.
Sinceridad
Nuestra oración debe ser auténtica y venir del corazón.
Perseverancia
No debemos desanimarnos si nuestras oraciones no son respondidas de inmediato. Debemos perseverar en la oración, creyendo en el tiempo de Dios.
¿Por qué debemos orar?
- Para honrar a Dios y reconocer su autoridad (Lucas 11:2).
- Para pedir su provisión, guía y perdón (Lucas 11:3-4).
¿Cómo debemos orar?
- Dirigirnos a Dios como "Padre" (Lucas 11:2).
- Priorizar la santidad de su nombre (Lucas 11:2).
- Anhelar el establecimiento de su reino (Lucas 11:2).
- Buscar su voluntad como la máxima prioridad (Lucas 11:2).
- Pedir provisión diaria (Lucas 11:3).
- Buscar el perdón por nuestros pecados (Lucas 11:4).
- Perdonar a los demás como Dios nos perdona (Lucas 11:4).
- Pedir protección contra la tentación (Lucas 11:4).