Cómo ministrar a no creyentes moribundos

Consideraciones importantes

Servir a personas moribundas requiere sensibilidad y sabiduría. Antes de compartir el Evangelio, evalúa estos factores:

  • Creencia en el infierno: ¿Crees firmemente en su existencia y urgencia?
  • Amor por el individuo: ¿Anhelas sinceramente su salvación y gozo eterno?
  • Coraje ante la oposición: ¿Estás dispuesto a desafiar las objeciones de autoridades o familiares por el bien de la persona?

Cuando no evangelizar

En ciertas situaciones, evangelizar puede no ser apropiado:

  • Blasfemia o manipulación: No discutas con quienes rechazan abiertamente el Evangelio o intentan burlarse de ti.
  • Resistencia extrema: Respeta los límites de aquellos que se muestran hostiles al mensaje cristiano.
  • Autoridad legítima: Escucha las preocupaciones de autoridades médicas o familiares, pero recuerda que la autoridad de Dios supera a cualquier autoridad humana.

Cómo abordar a una persona moribunda

  • Solicita permiso: Si la persona está consciente, pídele permiso para compartir el Evangelio.
  • Mantén la sensibilidad: Habla con amabilidad y compasión, reconociendo la gravedad de su situación.
  • Ofrece esperanza: Explica que Dios ama a la persona y ofrece perdón y salvación a través de Jesús.

Ejemplo de mensaje

"Hola, [nombre]. Soy [tu nombre], una de tus enfermeras. Quiero que sepas que te amamos. Dios te ama y envió a su Hijo Jesús para cargar con los pecados de quienes confían en Él. Jesús es un Salvador maravilloso, un amigo fiel, lleno de misericordia y gracia. Ha perdonado todos mis pecados, y estoy muy agradecida. Quiere perdonar los tuyos también. Confía en Él como tu Salvador y cae en sus brazos de amor".

Abordar las objeciones de los familiares

Si un familiar se opone a compartir el Evangelio, recuerda que:

  • El amor y la compasión de Dios se extienden a todos, incluyendo a los moribundos.
  • Compartir el Evangelio es un acto de amor que puede traer esperanza y paz.
  • La autoridad de Dios es suprema, y no debemos dejar que las objeciones humanas impidan que los moribundos escuchen la verdad salvadora del Evangelio.

¿En qué situaciones no es obligatorio compartir el evangelio?

En situaciones donde el oyente demuestra una actitud profundamente hostil o manipuladora hacia el evangelio, o cuando un grupo de personas se muestra excepcionalmente resistente a escuchar.

¿Qué hacer si el paciente no puede hablar?

Es apropiado hablar palabras de esperanza en el oído de un paciente que no puede responder, incluso si no se sabe si puede escuchar o comprender.

¿Qué se debe decir a un paciente moribundo?

Se puede decir algo como: "Hola, John. Soy Mary. Quiero asegurarme de que estés cómodo y que se satisfagan tus necesidades. No sé si puedes escucharme o comunicarte conmigo. Quiero que sepas que eres amado. Yo te amo. Y Dios te amó al enviar a su Hijo Jesucristo al mundo para cargar con los pecados de quienes confían en él. Jesús es un gran Salvador, incluso ahora. Es un gran Amigo. Es muy misericordioso, paciente y bondadoso. Ha perdonado todos mis pecados, y estoy muy agradecida. Y quiere que sepas que está dispuesto a perdonar todos tus pecados. No importa cuáles sean o cuántos sean, todo lo que tienes que hacer es entregarte a la misericordia de Cristo. Cae en los brazos de Cristo y confía en él como un Salvador precioso. Así que voy a orar por ti, John. Padre celestial, gracias por tu amor. Gracias por la gracia asombrosa que salva a pecadores como yo y John cuando simplemente confiamos en nuestro precioso Salvador Jesucristo. Te pido que te vuelvas real para John mientras yace aquí. En el nombre de Jesús, amén".

Leer Más:  ¿Quién eres realmente? Una obra maestra de Dios

¿Qué hacer si un familiar prohíbe hablar del evangelio?

El mandamiento de amor no es inferior a un mandato humano.

Subir