¿Buscas tu hogar verdadero?
El exilio de Caín
Desde que nuestros primeros padres se rebelaron contra Dios, hemos vagado sin descanso, buscando nuestro camino de regreso. Caín, el asesino de su hermano Abel, fue exiliado por Dios y, en su desesperación, construyó una ciudad para establecerse permanentemente. Pero su intento fue en vano, una búsqueda de seguridad en un mundo que ya no era el Edén.
El llamado de Abraham
En contraste con Caín, Abraham respondió al llamado de Dios y dejó su hogar sin saber a dónde iba. Su fe se basaba en la promesa de una herencia futura, una ciudad eterna diseñada y edificada por Dios. Abraham se convirtió en un extranjero en una tierra extraña, pero su esperanza estaba fija en la ciudad por venir.
Libertad en la fe
Como seguidores de Cristo, también somos extranjeros y exiliados en este mundo. Pero nuestra esperanza no es una tierra física como Canaán, sino el hogar celestial que Jesús nos ha preparado. Esta esperanza nos libera de la inseguridad y el miedo, permitiéndonos dejar atrás las falsas seguridades y seguir a Jesús.
Vivir como peregrinos
Mientras vivimos en este mundo como peregrinos, nuestro propósito es buscar la presencia eterna de Dios. Pasamos por esta vida pasajera con la mirada puesta en la esperanza del hogar celestial. No estamos apegados a las posesiones terrenales, pues sabemos que nuestro verdadero hogar es con Dios.
Compartir la esperanza
Nuestra esperanza en el hogar celestial es una bendición que debemos compartir con el mundo errante. Es una esperanza que ofrece libertad, seguridad y significado en medio de la incertidumbre y la desesperación. Al abrazar esta esperanza y seguir a Jesús, podemos ser un faro de luz para un mundo que busca su verdadero hogar.
¿Quién es Jenny Frank y dónde ha vivido y servido?
Jenny Frank es una graduada de la Universidad de Northwestern en St. Paul, Minnesota, que ha vivido y servido en Medio Oriente y Asia Central durante el año pasado. Actualmente vive en Minneapolis y espera servir en el extranjero a largo plazo.
¿Cuál es el destino de los humanos después de la rebelión en el Jardín?
Después de que los humanos se rebelaron, fueron condenados a vagar sin rumbo fijo, intentando encontrar el camino de regreso a la presencia de Dios.
¿Cómo se diferencia el llamado de Abraham de la maldición de Caín?
Abraham fue llamado a dejar su tierra natal y seguir a Dios, mientras que Caín fue maldecido a ser un vagabundo y un errante. Abraham confió en las promesas de Dios y buscó la ciudad celestial, mientras que Caín trató de establecerse en la tierra y construir su propio reino.
¿Cómo nos libera la esperanza de una nueva vida?
La esperanza de una nueva vida nos libera de las inseguridades y nos permite dejar atrás las comodidades del mundo para seguir a Jesús. Nos da la fe para renunciar a las cosas temporales por las eternas.