¡Alabado Sea el Señor por Su Amor Eterno!

El Amor Inmutable de Dios

El Salmo 136 es un canto de alabanza que exalta el amor inmutable de Dios. Comienza con una simple pero profunda afirmación: "Dad gracias al Señor, porque él es bueno". Esta bondad se describe como un "amor leal" que perdura para siempre.

Milagros y Creación

El salmista reconoce los poderosos milagros de Dios, como la creación de los cielos y la colocación de la tierra sobre las aguas. También menciona las luces celestiales: el sol, la luna y las estrellas. Estos milagros son una prueba del amor y el poder de Dios.

Liberación y Protección

El Salmo continúa celebrando la liberación de Israel de Egipto. Dios derrotó al Faraón y su ejército, demostrando su fuerza y compasión. El salmista también recuerda cómo Dios guió a su pueblo a través del desierto y los protegió de sus enemigos.

Heredad y Alivio

Dios concedió a Israel la tierra de los reyes amorreos y basán como herencia, cumpliendo su promesa de brindarles un hogar. El salmista reconoce que este acto de amor fue un recordatorio del cuidado y la fidelidad de Dios.

Gracia y Provisión

El Salmo concluye con una nota de gratitud por la gracia y la provisión de Dios. Incluso en momentos de debilidad, Dios se acuerda de su pueblo y los salva. Él satisface las necesidades de todas las criaturas vivientes, demostrando su amor y bondad inagotables.

El Salmo 136 es un poderoso recordatorio del amor eterno de Dios. Sus milagros, liberación, protección y gracia son un testimonio de su fidelidad inquebrantable. Al alabar y dar gracias a Dios por su amor perdurable, podemos experimentar su paz y consuelo en medio de las adversidades de la vida.

Preguntas Frecuentes

¿Por qué debemos dar gracias al Señor?

  • Porque Él es bueno (versículo 1) y Su amor fiel perdura para siempre (versículos 1-9, 16, 23-26).

¿Quién es el Señor?

  • El Dios de dioses (versículo 2), el Señor de señores (versículo 3), el Creador del universo (versículos 5-9), el Salvador de Israel (versículos 10-15), el Proveedor de sustento (versículo 25) y el Dios del cielo (versículo 26).

¿Cuáles son las maravillas que ha hecho el Señor?

  • Creó los cielos y la tierra (versículos 5-6), hizo las estrellas y los planetas (versículos 7-9), liberó a Israel de Egipto (versículos 10-15), mató a poderosas naciones (versículos 17-21) y recordó a Israel en su debilidad (versículo 23).

¿Por qué debemos confiar en el Señor?

  • Porque Su amor fiel es perpetuo (versículos 1-9, 16, 23-26) y nos salva de nuestros enemigos (versículo 24).

¿Cómo debemos expresar nuestra gratitud al Señor?

  • Dándole gracias (versículos 1-3, 7-9, 12-13, 16, 21, 23-26), reconociendo Su bondad (versículo 1), alabar Su nombre (versículos 2-3) y confiar en Su amor fiel (versículos 1-9, 16, 23-26).

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