¡Aborrece el mal, aférrate al bien!
El verdadero amor implica odio
En el versículo de Romanos 12:9, el apóstol Pablo nos exhorta a "aborrecer lo malo, aferrarse a lo bueno". Este mandamiento es esencial para el verdadero amor, ya que no podemos afirmar amar a las personas mientras toleramos el mal que las daña.
El mal hiere a las personas y deshonra a Dios. Si apreciamos algo que daña nuestra alegría y exhibición de Cristo, pecamos contra los demás, no solo contra nosotros mismos. Les robamos lo que Dios nos creó para darles.
5 verdades que nos liberan
Al seguir este mandamiento, nos liberamos de muchas de las trampas de nuestro tiempo:
- Existe el bien y el mal objetivos: No están definidos por nuestros sentimientos o preferencias.
- Elegir no es suficiente: Debemos odiar el mal y abrazar el bien con intensidad.
- Dios manda que cambiemos nuestras emociones: Nacimos para amar lo malo, pero podemos nacer de nuevo y experimentar un corazón nuevo.
- El bien objetivo es bueno para nosotros, el mal nos perjudica: Los mandamientos de Dios expresan lo que es bueno y malo, y lo que es bueno es beneficioso para nosotros.
- El amor genuino debe odiar: El mal lastima a otros directa e indirectamente al dañar nuestra imagen de Cristo.
Cristo, nuestro mayor bien
El bien objetivo supremo es Cristo mismo. Él es nuestro bien y la victoria sobre todo mal. En esta temporada de Adviento, aferrémonos a Cristo y detestemos todo lo que lo deshonre. Creer y enseñar la Palabra de Dios es el mejor regalo que podemos dar a las generaciones venideras.
Preguntas frecuentes
¿Qué significa "aborrecer el mal"?
Aborrecer el mal significa rechazarlo intensamente y sentir disgusto por él. Implica un rechazo interno y emocional hacia las acciones y comportamientos que no están en línea con los valores morales objetivos.
¿Por qué es importante aborrecer el mal?
Aborrecer el mal es esencial porque el mal daña a las personas y deshonra a Dios. Protegernos a nosotros mismos y a los demás del daño causado por el mal requiere un rechazo activo de las acciones y comportamientos perjudiciales.
¿El amor puede incluir el odio?
En este mundo imperfecto, el amor genuino debe incluir el odio hacia el mal. Esto se debe a que el mal daña a las personas y deshonra a Dios. Amar a los demás implica protegerlos del daño y mostrarles la belleza de Cristo, lo que requiere rechazar el mal que oscurece su valor.
¿Cómo puedo aborrecer el mal?
Aborrecer el mal requiere un cambio interno del corazón. Podemos experimentar este cambio a través del nuevo nacimiento, donde nuestros deseos y emociones se alinean con la perspectiva de Dios sobre el bien y el mal. También implica una lucha continua por la transformación diaria, contemplando la gloria de Dios y permitiendo que nos conforme a su semejanza.
¿Qué es el bien objetivo?
El bien objetivo es aquello que es bueno fuera de nuestros propios deseos o preferencias. No depende de nuestra subjetividad, sino que se basa en la naturaleza inmutable de Dios y su revelación a través de Jesucristo. El bien objetivo guía nuestras elecciones y determina lo que es moral y éticamente correcto.