Abadón: El destructor de los últimos días
Abadón, el ángel de la destrucción
En el libro del Apocalipsis, encontramos una figura misteriosa llamada Abadón. El nombre significa "destrucción" y representa un ser poderoso que aparece durante los últimos días. Se le menciona como "el ángel del abismo" y "el rey de las langostas".
Las langostas de Abadón
Abadón tiene el poder de liberar una plaga de langostas que atormentarán a los incrédulos. Estas langostas tienen dientes afilados y aguijones que causan dolor extremo. Sin embargo, no pueden dañar a los que llevan el sello de Dios en sus frentes.
El propósito de las langostas
La plaga de langostas sirve como un juicio sobre aquellos que han rechazado a Dios. Su propósito es revelar la verdad sobre su incredulidad y llevarlos al arrepentimiento. Para los creyentes, las langostas son un recordatorio de la protección de Dios y la importancia de permanecer fieles.
Abadón en el Antiguo Testamento
Si bien el personaje de Abadón se menciona principalmente en el Apocalipsis, la palabra "abadón" aparece en el Antiguo Testamento. Allí, se refiere a un lugar de destrucción o al reino de los muertos. También se usa para describir el castigo divino que caerá sobre los malvados.
Lecciones de Abadón
La historia de Abadón nos enseña varias lecciones importantes:
- El poder destructivo del pecado y la incredulidad.
- La protección y el cuidado de Dios sobre los que le son fieles.
- La importancia de estar preparados para los juicios venideros.
- La necesidad de evangelizar y llevar a otros a la salvación.
¿Quién es Abaddon en la Biblia?
Abaddon, también conocido como Apollyon, aparece en el último libro del Nuevo Testamento: Apocalipsis (Apocalipsis 9:11). Su nombre significa "destrucción", por lo que se puede deducir que no es un ser benevolente.
¿Por qué debemos conocer a Abaddon?
Aunque sus langostas no afectan a los creyentes en los tiempos finales, es importante conocer a Abaddon por las siguientes razones:
- Para ayudar a otros a conocer a Jesús antes de estos eventos.
- Para comprender que Dios limita el poder de Abaddon para destruir.
- Para discernir entre verdaderos y falsos creyentes, ya que las langostas de Abaddon revelan la verdadera naturaleza de la fe.