¡Todo el universo alabe al Señor!
Un llamado celestial
Desde las alturas celestiales, alaben al Señor, ángeles y ejércitos celestes. Brillen como estrellas, sol y luna, en su honor. Alaben al Dios que creó los cielos y las aguas que los cubren.
El clamor de la tierra
Desde la tierra, que resuenen las alabanzas: criaturas marinas, fuego y granizo, nieve y nubes, vientos que cumplen su voluntad. Montañas y colinas, árboles frutales y cedros, canten al Señor.
Alabanza universal
Todos los seres vivos, grandes y pequeños, se unan a la sinfonía de alabanza: bestias, ganado, reptiles y aves. Reyes y pueblos, jueces y príncipes, jóvenes y ancianos, niños y niñas, exalten el nombre del Señor.
El nombre exaltado
Su nombre es supremo, su gloria trasciende la tierra y el cielo. Ha fortalecido a su pueblo, un pueblo cercano a Él, Israel, para que sea una voz de alabanza.
Alabemos al Señor, pues todo lo que existe lo proclama. Que su nombre sea exaltado para siempre, un eco de gratitud en cada rincón del universo.
Preguntas Frecuentes sobre el Salmo 148
¿Quién es llamado a alabar al Señor en este salmo?
- Ángeles y ejércitos celestiales (v. 2)
- Sol, luna y estrellas (v. 3)
- Cielos y aguas celestiales (v. 4)
- Criaturas marinas y profundidades (v. 7)
- Elementos naturales (fuego, granizo, nieve, viento) (v. 8)
- Naturaleza (montañas, colinas, árboles) (v. 9)
- Animales (bestias, ganado, reptiles, aves) (v. 10)
-Autoridades y personas de todas las edades (v. 11-13)
¿Por qué está llamado el pueblo de Dios a alabarlo?
- Porque Él es el Creador, y ellos fueron creados por Su mandato (v. 5)
- Porque Él ha establecido un orden eterno para la creación (v. 6)
- Porque Él ha exaltado a Su pueblo y los ha hecho dignos de alabanza (v. 14)