El Misterio de la Resurrección: La Evidencia que Transformó la Historia
El Descubrimiento de la Tumba Vacía
En la tenue luz del alba del primer día de la semana, María Magdalena se acercó a la tumba de Jesús, solo para encontrarla abierta y vacía. Asombrada y angustiada, corrió hacia Pedro y el discípulo amado, exclamando: "¡Se han llevado al Señor!".
La Investigación y el Encuentro con Jesucristo
Pedro y el otro discípulo se apresuraron hacia la tumba, encontrándola vacía como había dicho María. Al mirar hacia adentro, vieron las vendas de lino y el pañuelo que había estado alrededor de la cabeza de Jesús, cuidadosamente doblados y colocados aparte. Era como si Jesús hubiera resucitado y dejado su envoltura vacía atrás.
Mientras María permanecía llorando fuera de la tumba, dos ángeles vestidos de blanco le preguntaron: "¿Por qué lloras?". Ella respondió: "Porque se han llevado a mi Señor". En ese momento, Jesús se paró frente a ella, pero María no lo reconoció. Suponiendo que era el jardinero, le preguntó dónde había puesto el cuerpo de Jesús.
Entonces Jesús dijo: "¡María!". Al oír su voz, ella se volvió y exclamó: "¡Rabboni!", que significa "Maestro". Jesús le dijo que no lo abrazara, pues aún no había ascendido al Padre.
La Aparición a los Discípulos
Más tarde ese mismo día, Jesús se apareció a sus discípulos en una habitación cerrada. Saludó con "La paz sea con vosotros" y mostró las heridas en sus manos y costado. Los discípulos se llenaron de alegría al verlo vivo.
Jesús les dijo que los enviaba como su Padre lo había enviado a él, y les dio el poder de perdonar o retener los pecados.
La Incredulidad de Tomás y la Confirmación de la Fe
Tomás, uno de los doce discípulos, no estaba presente cuando Jesús se apareció por primera vez. Cuando los demás le contaron lo que habían visto, se negó a creer a menos que pudiera ver y tocar las heridas de Jesús.
Ocho días después, Jesús se apareció nuevamente a los discípulos, incluso a Tomás, quien extendió su dedo y lo puso en las heridas de Jesús. Entonces Tomás proclamó: "¡Señor mío y Dios mío!". Jesús le dijo: "Bienaventurados los que no vieron y creyeron".
El Propósito del Evangelio
El evangelio de Juan fue escrito para que los lectores creyeran que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y que al creer en él pudieran tener vida en su nombre.
Preguntas Frecuentes
¿Quién descubrió primero la tumba vacía?
Mary Magdalene
¿Qué vieron los discípulos cuando entraron en la tumba?
Paños de lino y un pañuelo doblado
¿Con quién confundió María a Jesús cuando lo vio por primera vez después de la resurrección?
Un jardinero
¿Qué hizo Jesús después de aparecer a María?
Se apareció a sus discípulos en una habitación cerrada
¿Qué mostró Jesús a sus discípulos para probar que había resucitado?
Sus manos y costado con las marcas de los clavos
¿Quién dudó inicialmente de la resurrección de Jesús?
Tomás
¿Cómo se convenció Tomás de que Jesús había resucitado?
Tocando las heridas de Jesús
¿Cuál es el propósito del libro de Juan?
Creer que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y tener vida en su nombre