Protección Divina: Un Clamor contra los Enemigos Escondidos
Escudo Contra las Amenazas Ocultas
El Salmo 64 expresa la súplica de David a Dios por protección contra los enemigos ocultos que tramaban en su contra. David ruega a Dios que lo preserve del "temor del enemigo" (v. 1) y que lo esconda de "los planes secretos de los inicuos" (v. 2). Estos enemigos, "que afilan su lengua como espada" (v. 3), buscaban destruir su reputación con "palabras amargas" (v. 4).
La Trampa de los Perversos
Estos perversos tramaban "astucias" (v. 5) y se jactaban de su ingenio, creyendo que nadie los descubriría. Sin embargo, David confía en que Dios, con su sabiduría superior, "les disparará con una flecha" (v. 7) y los "hará tropezar con su propia lengua" (v. 8).
La Victoria de los Justos
El Salmo concluye con una nota triunfal. Todos los que presencian la intervención divina se llenarán de temor (v. 9) y declararán la obra de Dios (v. 9). "El justo se alegrará en Jehová y confiará en él" (v. 10), mientras que los de "recto corazón" se gloriarán (v. 10). Dios es el protector de sus fieles, y aquellos que buscan refugio en Él experimentarán Su justicia y misericordia.
Preguntas Frecuentes sobre el Salmo 64
¿Cuáles son los motivos de la oración de David?
David pide protección de Dios contra sus enemigos ocultos que lo amenazan con la violencia y la calumnia (versículos 1-4).
¿Cómo se describen los enemigos de David?
Son malvados, maquinan intrigas secretas, son expertos en el engaño y no temen actuar (versículos 2-5).
¿Cómo responderá Dios a la oración de David?
Dios herirá a los enemigos con sus flechas, haciéndolos caer en sus propias trampas (versículos 7-8).
¿Qué consecuencias sufrirán los enemigos de David?
Los que vean su caída temerán y reconocerán la mano de Dios en ello (versículo 9).
¿Cómo reaccionarán los justos ante la victoria de David?
Se alegrarán en el Señor, confiarán en él y se gloriarán en su corazón (versículo 10).