¡La Búsqueda de la Purificación: Un Clamor por la Misericordia!
El Reconocimiento del Pecado y la Súplica por el Perdón
El Salmo 51 es un clamor conmovedor de David, un rey que reconoce su pecado y busca la misericordia de Dios. Afirma su culpa, reconociendo que ha transgredido contra Dios y causado maldad. El peso de su pecado lo agobia, y ruega por el perdón.
La Oración por Limpieza y Restauración
David pide a Dios que lo limpie de su iniquidad y lo purifique de su pecado. Reconoce que su maldad está constantemente ante él, sirviendo como un recordatorio constante de su transgresión. Implora a Dios que lo lave, lo purgue y le otorgue un corazón limpio y un espíritu renovado.
El Anhelo de la Comunión y la Alegría
David anhela la restauración de su relación con Dios. Pide que Dios no lo eche de su presencia ni le quite su Espíritu Santo. También ruega por la alegría de la salvación y el sustento del Espíritu generoso de Dios.
El Compromiso con el Servicio y la Adoración
Si Dios lo perdona, David se compromete a enseñar a los transgresores los caminos de Dios y a llevar a los pecadores al arrepentimiento. Proclamará la justicia de Dios y abrirá sus labios para expresar su alabanza.
La Importancia de un Corazón Arrepentido
Dios no se complace con los sacrificios materiales, sino con un corazón roto y contrito. David reconoce que el sacrificio más aceptable es un espíritu quebrantado y humillado, que Dios no despreciará.
La Bendición para Sión y Jerusalén
El Salmo concluye con una petición de que Dios haga el bien a Sión y reconstruya los muros de Jerusalén. David cree que cuando Dios restaura su relación con él, también traerá bendiciones a la nación. Entonces, los sacrificios de justicia serán aceptables y la adoración se elevará a Dios con fervor renovado.
¿Qué hace el salmista cuando reconoce su pecado?
- Acepta su culpa (versículo 3)
- Pide misericordia (versículo 1)
- Solicita el perdón de Dios (versículo 7)
¿Qué atributos de Dios implora el salmista?
- Su misericordia (versículo 1)
- Su bondad (versículo 1)
- Su verdad (versículo 6)
- Su justicia (versículo 4)
¿Qué acciones específicas solicita el salmista a Dios?
- Limpiarlo de su pecado (versículo 2)
- Cambiarlo por dentro (versículo 10)
- No abandonarlo (versículo 11)
- Devolverle el gozo de la salvación (versículo 12)
¿Qué reconoce el salmista sobre la naturaleza del pecado?
- Es una afrenta a Dios (versículo 4)
- Es inherente a la naturaleza humana (versículo 5)
- Trae culpa y dolor (versículo 8)
¿Cuáles son los sacrificios que Dios desea?
- Un espíritu quebrantado (versículo 17)
- Un corazón contrito (versículo 17)
- Acciones justas (versículo 19)
