¿A qué árbol gigante te pareces?
El orgullo del faraón comparado con un majestuoso cedro
En tiempos antiguos, el faraón de Egipto era un hombre poderoso y arrogante. Se comparaba a sí mismo con un imponente cedro en el Líbano, un árbol que se elevaba sobre todos los demás. Sus ramas frondosas daban sombra a toda la tierra, y su copa tocaba los cielos.
La caída del faraón
Sin embargo, el orgullo del faraón no duró mucho. Dios lo entregó en manos de los babilonios, que lo derrotaron y derribaron como un árbol caído. Sus ramas se esparcieron por las montañas y los valles, y su sombra ya no cubría a las naciones. Todos los pueblos de la tierra lo abandonaron.
El destino de los orgullosos
La historia del faraón nos enseña que el orgullo es un camino peligroso. Quienes se exaltan a sí mismos serán humillados, y quienes confían en su propio poder caerán. El destino de los orgullosos es la ruina y la muerte.
El consuelo de los humildes
Mientras que el orgulloso faraón fue derribado, los humildes fueron consolados. Los árboles del Edén, que habían sido testigos de la caída del cedro, se regocijaron en las profundidades de la tierra. Porque ellos, a pesar de su apariencia humilde, habían confiado en Dios y habían sido preservados.
La historia del faraón es una advertencia para todos nosotros. Que no caigamos en la trampa del orgullo, sino que confiemos en Dios y busquemos su humildad. Porque el destino de los humildes es la exaltación y la vida eterna.
Preguntas Frecuentes
¿Por qué Dios castigó a Egipto con una catástrofe?
Porque Egipto, simbolizado por el faraón, se jactó de su grandeza y se exaltó por encima de Dios. (v. 10)
¿Cómo fue castigado Egipto?
Entregado al "poderoso de las naciones" (v. 11), que lo derrotó y destruyó su imperio. (v. 12)
¿Qué ocurrió en el reino de los muertos cuando Egipto fue derrotado?
Hubo luto, lamentado por el Líbano y otros árboles del Edén. (v. 15)
¿Quién más fue castigado junto con Egipto?
Los árboles del Edén, que habían envidiado la grandeza de Egipto. (v. 9, 17)
¿Qué lección aprendieron las naciones sobre la arrogancia?
Que la arrogancia conduce a la destrucción y que todas las naciones están sujetas al juicio de Dios. (v. 14, 16)
¿Cuál es el mensaje para los que se enorgullecen de su propia grandeza?
Que su orgullo será finalmente humillado y que sólo Dios es verdaderamente grande. (v. 18)
