¿Tu Matrimonio Gira Alrededor de Ti?
El Matrimonio no es Sobre Gratificación Personal
El matrimonio es un regalo precioso, pero a menudo lo entendemos mal. Muchos sueñan con el matrimonio, pero pocos están dispuestos a aceptar lo que implica. Hemos llegado a creer que el matrimonio se trata de nuestra propia satisfacción, en lugar del sacrificio personal.
El Matrimonio es un Llamado a la Abnegación
El apóstol Pablo enseña que el matrimonio es una unión desinteresada (Efesios 5:22-27). No se centra en la satisfacción personal, sino en la negación del yo. Esta verdad desafía nuestra naturaleza egoísta, que anhela un matrimonio que satisfaga nuestros deseos.
Buscando el Amor Egoísta
Deseamos desesperadamente el amor y la conexión emocional. Sin embargo, si no tenemos cuidado, dejamos que nuestros deseos egoístas guíen nuestra búsqueda del matrimonio. Creemos que el matrimonio solo vale la pena si encontramos al compañero perfecto, alguien que cumpla con nuestras necesidades específicas. Sin embargo, debemos resistir estos impulsos y buscar la guía de Dios.
El Sacrificio, el Centro del Matrimonio
Pablo nos exhorta a vivir vidas piadosas, motivadas por el amor a Cristo y la preocupación por los demás, no por la ganancia personal (Filipenses 2:1-4; Colosenses 3:12-14). Esto es aún más importante en el matrimonio. Estamos llamados a anteponer las necesidades de nuestro cónyuge a las nuestras, incluso en asuntos pequeños como la temperatura de la casa o la paciencia en las relaciones íntimas.
El Gozo del Autosacrificio
La verdadera belleza, propósito y satisfacción en el matrimonio surgen cuando reflejamos la naturaleza de Cristo, quien nos satisface completamente. Al dar nuestras vidas por nuestros cónyuges, como hizo Jesús, experimentamos el verdadero gozo que Dios diseñó para el matrimonio.
El Matrimonio Refleja la Relación de Cristo con Su Iglesia
Nuestros matrimonios terrenales están destinados a ser un reflejo de la hermosa relación entre Cristo y su iglesia (Efesios 5:31-32). Nuestras acciones en el matrimonio deben reflejar cómo Cristo nos ha tratado (Juan 15:13; Filipenses 2:5-8). Cuando nos sacrificamos por nuestros cónyuges, nuestros matrimonios emiten el dulce aroma del evangelio al mundo y nos recuerdan nuestro propio sacrificio.
La gratificación constante nunca traerá alegría duradera en el matrimonio. En cambio, cuando nos sacrificamos por nuestros cónyuges, dejamos que brille la verdadera luz del matrimonio. Queremos que nuestros matrimonios sean menos sobre nosotros y más sobre Cristo. El sacrificio fue el fundamento que trajo a los pecadores una redención gloriosa, y es el fundamento que traerá a los matrimonios el mayor gozo, el placer más profundo y el verdadero propósito.
Preguntas Frecuentes
¿Cuál es el propósito del matrimonio según las enseñanzas cristianas?
El matrimonio es una unión desinteresada diseñada para reflejar la relación entre Jesús y su Iglesia, donde el sacrificio por el otro es esencial.
¿Cómo puedo evitar que el egoísmo dañe mi matrimonio?
Ora contra los deseos egoístas y busca la guía de Dios y de otros creyentes. Prioriza las necesidades de tu cónyuge por encima de las tuyas, incluso en asuntos aparentemente triviales.
¿Qué significa "muerte a uno mismo" en el contexto del matrimonio?
Significa renunciar a nuestros propios deseos y buscar servir a nuestro cónyuge, imitando el sacrificio de Jesús por nosotros.
¿Por qué es importante el sacrificio en el matrimonio?
El sacrificio refleja el carácter de Cristo y produce gozo, satisfacción y propósito verdadero en la relación matrimonial.
¿Cuál es el objetivo del matrimonio según las Escrituras?
Mostrar la realidad del Evangelio al mundo y recordar a las parejas el sacrificio de Cristo por ellas.