¿Cómo recibir el reino que no puede ser sacudido?
El gran sacudimiento final
Dios ha preparado un gran terremoto final para poner fin a este mundo y dar inicio a algo mucho mejor: la consumación de su reino. Este sacudimiento removerá todo lo que es inestable y dejará solo lo que no puede ser sacudido: el reino de Dios y quienes habitan en él.
Los dolores de parto
Antes de este fin, Dios ha establecido que ocurran terremotos y otros desastres menores para advertirnos de algo grandioso. Estos son como las contracciones y dolores de parto, que indican que el nacimiento está cerca. Estas calamidades son señales de esperanza, pues señalan el advenimiento del reino.
El don del reino inamovible
Antes del final de esta era, Dios está ofreciendo a todos los que creen en su Hijo un reino que no puede ser sacudido y que durará para siempre. Este reino ya ha sido recibido por aquellos que han puesto su fe en Cristo. Aunque puede que enfrentemos calamidades en este mundo, nuestro reino en Cristo es inquebrantable.
Dios es un fuego consumidor
En vista de estas verdades, debemos adorar a Dios con reverencia y temor, reconociendo que es un fuego consumidor hacia todo pecado. Debemos vestirnos con la justicia de Jesucristo para que el fuego de Dios se manifieste en nosotros como gloria, no como castigo.
Preguntas Frecuentes sobre "Un Reino Inamovible"
¿Qué mensaje está tratando de transmitir Dios a través de los terremotos?
Dios está advirtiendo que se acerca un gran terremoto final que destruirá el mundo tal como lo conocemos y traerá el reino de Dios al cumplimiento. Los terremotos y otros desastres que experimentamos actualmente son "dolores de parto" que preceden a este evento.
¿Por qué Dios permite que ocurran terremotos?
Dios permite que ocurran terremotos como advertencias y oportunidades para que la humanidad se vuelva hacia Él. Son recordatorios de la inestabilidad del mundo y la necesidad de buscar refugio en el reino inamovible que Él ofrece.
¿Qué es el "reino inamovible" que se menciona en el texto?
El "reino inamovible" es el reino de Dios, que es eterno, estable y no puede ser sacudido. Los que creen en Jesucristo reciben este reino como un regalo y pueden confiar en su seguridad y estabilidad incluso en medio de los desafíos de la vida.
¿Cómo podemos recibir el reino inamovible?
Podemos recibir el reino inamovible creyendo en Jesucristo como nuestro Salvador y Señor. Al confiar en Él, recibimos su perdón, el Espíritu Santo y la promesa de vida eterna en el reino de Dios.
¿Qué significa adorar a Dios con reverencia y temor?
Adorar a Dios con reverencia y temor significa reconocer su poder, santidad y justicia. Implica un profundo respeto y temor por Su presencia, así como una disposición a obedecer Sus mandamientos y vivir según Su voluntad.