¡Milagro en Jerusalén!: Jesús Sana al Ciego de Nacimiento

El Encuentro Milagroso

Mientras Jesús paseaba por las calles de Jerusalén, se encontró con un hombre ciego de nacimiento. Los discípulos, intrigados, le preguntaron a Jesús por qué había nacido así, si fue por sus pecados o los de sus padres. Jesús respondió que no era por ninguna de esas razones, sino para que se manifestara el poder de Dios en él.

El Poder del Barro y el Agua

Jesús escupió en el suelo, hizo barro con la saliva y lo untó en los ojos del ciego. Luego, le dijo que fuera a lavarse al estanque de Siloé. El hombre obedeció y, para su asombro, al lavarse sus ojos, ¡pudo ver!

El Ciego Testifica

Los vecinos del ciego, que lo conocían como un mendigo, se quedaron atónitos. Algunos dijeron que era él, mientras que otros dudaron. Sin embargo, el ciego testificó con firmeza: "¡Soy yo!". Les contó cómo Jesús lo había sanado y los guió al estanque de Siloé.

La Investigación de los Fariseos

Los fariseos, celosos de la popularidad de Jesús, llevaron al ciego ante ellos. Le interrogaron sobre la curación, que había tenido lugar en sábado, violando así sus reglas. Algunos de los fariseos acusaron a Jesús de no ser de Dios, mientras que otros se maravillaban por el milagro.

El Ciego Defiende a Jesús

Los fariseos llamaron a los padres del ciego y les preguntaron si era su hijo y si había nacido ciego. Los padres lo confirmaron, pero dijeron que no sabían cómo había recuperado la vista. Entonces, los fariseos se volvieron hacia el ciego y lo presionaron para que condenara a Jesús. Sin embargo, el hombre se mantuvo firme en su creencia de que Jesús era un profeta.

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La Expulsión de la Sinagoga

Los fariseos, frustrados por la fe del ciego, lo expulsaron de la sinagoga. Poco después, Jesús se encontró con el ciego sanado y le preguntó si creía en el Hijo del Hombre. El ciego preguntó quién era y Jesús le reveló que era él mismo. El hombre adoró a Jesús, reconociéndolo como el Mesías.

Jesús, la Luz del Mundo

Jesús declaró que había venido al mundo para juzgar, dando vista a los ciegos y mostrando a los que se creen con vista que en realidad están ciegos. Los fariseos presentes se ofendieron, pero Jesús les recordó que su pecado persistía porque afirmaban ver cuando no era así.

Preguntas Frecuentes sobre la Sanidad del Ciego de Nacimiento

¿Por qué el hombre nació ciego?

  • Jesús respondió que no fue por sus pecados ni por los pecados de sus padres, sino para que el poder de Dios se manifestara en él. (Juan 9:3)

¿Cómo sanó Jesús al hombre?

  • Jesús escupió en la tierra, hizo lodo con la saliva y lo untó sobre los ojos del hombre. Luego le dijo que se lavara en el estanque de Siloé. El hombre obedeció y recuperó la vista. (Juan 9:6-7)

¿Cómo reaccionaron los vecinos y conocidos del hombre?

  • Algunos reconocieron que era el mismo hombre que solía mendigar, mientras que otros dudaron y dijeron que simplemente se parecía a él. (Juan 9:8-9)

¿Qué pensaron los fariseos sobre la sanidad?

  • Algunos creían que Jesús no era de Dios porque había sanado en sábado. Otros estaban asombrados por los milagros que hacía, pero estaban divididos. (Juan 9:14-16)
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¿Por qué los padres del hombre tenían miedo de los fariseos?

  • Los fariseos habían amenazado con expulsar de la sinagoga a cualquiera que reconociera a Jesús como el Mesías. (Juan 9:22)

¿Cómo respondió el hombre a las acusaciones de los fariseos?

  • Defendió con valentía a Jesús, afirmando que no sabía si era un pecador, pero que le había dado la vista. También acusó a los fariseos de ceguera espiritual. (Juan 9:24-31)

¿Qué hizo Jesús después de que el hombre fuera expulsado de la sinagoga?

  • Jesús lo encontró y le preguntó si creía en el Hijo del Hombre. El hombre reconoció a Jesús como el Hijo del Hombre y le adoró. (Juan 9:35-38)

¿Cuál fue el mensaje espiritual detrás de la sanidad?

  • Jesús afirmó que vino al mundo para dar vista a los ciegos y mostrar a quienes pensaban que podían ver que estaban ciegos espiritualmente. (Juan 9:39)

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