Cristo vino al mundo para rescatar a los pecadores
Buenas noticias de esperanza para ti
El nacimiento del Hijo eterno de Dios como Jesucristo es un hecho histórico. Sin embargo, muchos creen en este hecho pero viven como todos los demás, con las mismas ansiedades de perder lo bueno y las frustraciones de no poder cambiar lo malo. Claramente, responder correctamente en encuestas sobre hechos históricos no aporta mucho poder.
La venida del Hijo de Dios fue mucho más que un hecho histórico. Fue un mensaje de esperanza enviado a todos nosotros, desde adolescentes hasta padres solteros, esposos malhumorados y esposas tristes, mujeres con sobrepeso y hombres impotentes, vecinos con discapacidades, homosexuales, predicadores, amantes y tú. Y puesto que el Hijo de Dios vivió, murió, resucitó, reina y volverá, el mensaje de Dios a través de él trasciende el hecho histórico. Es un regalo de Navidad para ti hoy, 25 de diciembre de 1983, de la voz del Dios vivo.
Lo bueno y valioso nunca se perderá
Muchos en nuestra congregación, debido a la edad o la enfermedad, se preguntarán inevitablemente hoy: "¿Será esta mi última Navidad?". La vida es buena y valiosa, y no queremos perderla. Podemos hablar todo lo que queramos sobre las cosas buenas de la vida, pero si no tenemos vida, no tenemos nada. "¿De qué le sirve al hombre ganar el mundo entero si pierde su vida?". ¡Cuán preciosa es nuestra vida! Si no lo sientes ahora, espera a que te pongas muy enfermo. Entonces sabrás por qué Ezequías lloró amargamente con su enfermedad terminal y suplicó por más años (2 Reyes 20:1-7).
El mensaje de Navidad para ti, que ves tu muerte en el horizonte, es que nunca tienes que perder tu vida. Es bueno vivir. Tu vida es valiosa y puede salvarse.
Lo malo e indeseable puede cambiar
Pero no solo eso, el mensaje de Navidad es que lo que es malo e indeseable en tu vida puede cambiar. Dondequiera que la gente dice sobre sus malos hábitos: "Así soy yo, tendrás que acostumbrarte", el mensaje de Navidad ha sido rechazado. Es como si el camión de remolque llegara a tu coche averiado y tú dijeras: "¡Ah, no sirve de nada, así es como es este coche!". Y ni siquiera le dejas conectar sus cables. El mensaje de Navidad es el cable de puente entre Dios y tu vida. Y el poder que fluye es el poder de cambiar.
¿Realmente quieres cambiar?
Antes de que alguien diga: "Oh, he probado la religión y no ha ayudado", permíteme preguntar: ¿Cuántos de vosotros habéis ayunado alguna vez durante tres días? ¿Dos días? ¿Un día? ¿Has tomado la Palabra de Dios, has pedido un día de vacaciones, te has ido solo de viernes a domingo y has saturado tu mente con santidad y has derramado tu alma en anhelo al Señor por el cambio? ¿Has reunido a tu alrededor a dos o tres hermanos o hermanas espirituales, has compartido con ellos el hábito que quieres romper, has buscado su oración sincera diaria y te has hecho responsable ante ellos? Si no, entonces no digas que la religión no funciona.
Moisés ayunó cuarenta días. Elías ayunó cuarenta días. Jesús ayunó cuarenta días y pasó noches enteras en oración. ¿Cuándo fue la última vez que deseaste tanto un cambio en tu vida que pasaste un día entero en oración y ayuno buscándolo al Señor, por no mencionar tres días como Pablo (Hechos 9:9), o tres semanas como Daniel (Daniel 10:2,3), o cuarenta días como Moisés? El problema con la mayoría de nosotros no es que el mensaje de Navidad sea impotente, sino que realmente no queremos cambiar. "Me buscaréis y me hallaréis (dice el Señor, en Jeremías 29:13) cuando me busquéis de todo corazón". Cuando quieras con todo tu corazón librarte de lo malo e indeseable, Dios te dará el regalo de Navidad del cambio.
Preguntas frecuentes
H3. ¿Qué mensaje tiene la Navidad para mí este año?
El mensaje de Navidad es que nada bueno y precioso en tu vida se perderá jamás y que todo lo malo e indeseable puede cambiar.
H3. ¿Cómo puedo evitar perder lo que es bueno en mi vida?
Dios te asegura que incluso cuando las cosas buenas parezcan escaparse de tus manos, Él puede recuperarlas y restaurarlas. No debes vivir con miedo a perder lo que amas.
H3. ¿Puedo cambiar lo que es malo en mi vida?
Sí, el mensaje de Navidad es que todo lo malo e indeseable puede cambiar. Dios puede darte el poder para romper los malos hábitos y vencer la esclavitud del pecado.
H3. ¿Cómo puedo recibir el regalo del cambio de Dios?
Debes buscar a Dios con todo tu corazón, saturarte de su Palabra, orar con fervor y ayunar. Solo cuando tus motivos sean puros, podrás recibir el regalo puro del cambio.
H3. ¿Puedo cambiar cualquier cosa?
Sí, con el poder de Cristo, puedes cambiar cualquier cosa en tu vida. Desde los malos hábitos hasta las actitudes negativas, todo puede transformarse.
H3. ¿Por qué es tan importante el gimnasio de la piedad de Cristo?
El gimnasio de la piedad es un lugar donde puedes fortalecer tus músculos espirituales y trabajar para vencer el pecado. El ejercicio espiritual es tan importante como el físico y puede conducir a una vida más victoriosa.
H3. ¿Soy demasiado pecador para ser salvado?
No, la misericordia y el poder de Cristo están disponibles para todos los pecadores. Incluso si has sido el peor de los pecadores, Dios todavía te ofrece la oportunidad de ser perdonado y cambiado.