El libre albedrío es la capacidad de tomar decisiones propias. Nos hace responsables de nuestras acciones, palabras y pensamientos. El libre albedrío distingue entre las acciones sobre las que no tenemos control y aquellas sobre las que sí.
Los actos de Satanás y el libre albedrío
Según la Biblia, Satanás tuvo libre albedrío. Como creación de Dios, fue un ser espiritual con emociones e inteligencia. Inicialmente, adoró a Dios, pero se llenó de orgullo y aspiró a ser como Él.
Su libre albedrío le permitió rebelarse contra Dios y ser arrojado del cielo (Apocalipsis 12:7-9). También pudo influenciar a otros ángeles para que lo siguieran, quienes también eligieron la oscuridad (2 Pedro 2:4,9-10).
El camino equivocado elegido por Satanás
El libre albedrío de Satanás lo llevó a elegir el camino del orgullo y la rebelión. Deseó ser más que una creación de Dios y desafió Su autoridad (Isaías 14:13-14).
Su elección tuvo graves consecuencias. Fue expulsado del cielo y condenado a una existencia eterna en la oscuridad (2 Corintios 11:3).
Lecciones para nosotros
El libre albedrío de Satanás nos enseña:
El peligro de elegir el camino equivocado, incluso con libre albedrío.
La importancia de seguir a Jesucristo, quien nos guía por el camino correcto.
Que, aunque Satanás tenga libre albedrío, Jesús es más poderoso y puede protegernos de sus influencias (Marcos 8:33).
En conclusión, Satanás tuvo libre albedrío y lo utilizó para elegir el camino del orgullo y la rebelión. Sus acciones sirven como advertencia para que tengamos cuidado con nuestro propio libre albedrío y que sigamos a Jesucristo para evitar caer en la oscuridad.
El misterio del alimento envenenado En el Salmo 69:21, encontramos un versículo que describe una experiencia angustiosa: “Me dieron bilis como alimento y me dieron vinagre para calmar mi sed“.
Un llamado a la obediencia y el amor El libro de Deuteronomio nos ofrece una guía clara sobre lo que Dios espera de nosotros. En Deuteronomio 10:12-13, leemos que Dios
